La dirección de la planta viguesa de PSA Peugeot Citroën ha planteado a los sindicatos que, en el acuerdo sobre las medidas de ajuste salarial para mejorar la competitividad de la fábrica, deben recogerse necesariamente tres medidas: la congelación de salarios hasta 2019, la reducción del 33 por ciento de la prima por objetivos y la supresión del denominado complemento de presencia.

Según han informado fuentes de la empresa a Europa Press, al margen de estas condiciones que PSA ve como innegociables, la dirección sí estaría dispuesta a revisar su propuesta de reducción del 10 por ciento del complemento por antigüedad, la de reducir el 50 por ciento del complemento a trabajadores de las cabinas de lacas, y las adecuaciones en permisos y licencias.

Por otra parte, la empresa también ha trasladado a los sindicatos un esbozo de su plan industrial para el futuro, un plan "ambicioso" pero que estaría condicionado a que la planta de Balaídos fuese la encargada de montar las nuevas furgonetas (proyecto k9). Esa adjudicación conllevaría la asignación de un determinado presupuesto para inversiones que supondrán "un cambio sustancial en el modo de funcionamiento" de la fábrica, y que afectarían a las dinámicas logísticas.