Las facciones palestinas Al Fatá y Hamás han acordado que un Gobierno de unidad asuma el control de la Franja de Gaza, una de los requisitos contemplados en el acuerdo de paz que puso fin en agosto a la operación militar israelí 'Margen Protector', según negociadores presentes en el diálogo de El Cairo.

El alto el fuego sellado en agosto entre israelíes y palestinos para poner fin al conflicto armado en la Franja de Gaza estipulaba que debía ser la Autoridad Palestina, liderada por Mahmud Abbas, la que se encargase de un territorio controlado en solitario por Hamás desde el año 2007.

Uno de los representantes de Al Fatá, Azzam Ahmed, ha confirmado este jueves que las partes han pactado que el Ejecutivo de unidad que encabeza Abbas asuma el control de la Franja.

Las negociaciones entre las dos facciones permanecían estancadas principalmente por las discrepancias en torno a los impagos a los funcionarios de la Franja de Gaza. Sin embargo, según Ahmed, también en esto hay acuerdo: "Recibirán el sueldo del Gobierno de unidad porque todos son palestinos y es el Gobierno de todos los palestinos".

El responsable del comité político de Hamás, Musa Abu Marzuk, ha informado de que el control de los puestos fronterizos -otra de las cuestiones espinosas- dependerá el gobierno de unidad y de Naciones Unidas. La ONU, ha añadido, deberá llegar a un acuerdo tanto con palestinos como con israelíes "sobre cómo gestionar" estos pasos.

El cruce de Rafá, el único que no controla Israel y situado en la frontera entre la Franja de Gaza y Egipto, no forma parte del acuerdo sellado por Al Fatá y Hamás.