Padres de Manzaneda (Ourense) no enviarán esta semana a sus hijos al colegio para reclamar la reapertura de la cocina

La ANPA denuncia el cierre de la cocina abierta hace 40 años a cambio de un servicio de 'cátering' que tendrá que hacer 200 kilómetros

Los 22 escolares del colegio de infantil y primaria de Manzaneda no han acudido a clase en el primer día del curso escolar para reclamar que la Consellería de Educación hable con los padres y madres sobre el comedor cerrado, para sustituir el contrato de cocinero por un servicio de comidas que tendrá que hacer 200 kilómetros para alimentar a los alumnos.

Según uno de los portavoces del ANPA, Fernando Álvarez, la Consellería de Educación tómo esa decisión "sin hablar siquiera" con los padres de los alumnos, así que acordaron que sus hijos no acudirían a clase hasta que ese diálogo se produzca.

"Evidentemente los niños no pueden estar sin escolarizar, pero toda esta semana se quedarán en casa, después de acudir este miércoles a primera hora al colegio, sólo para reivindicar la reapertura de un comedor y cocina en funcionamiento ininterrumpido durante 40 años y que seguro que es mucho más rentable que traer cada día la comida a cargo de una empresa de Vigo o Porriño, como prevén hacer", ha esgrimido.

Ha asegurado saber que la empresa acudió al centro escolar en el primer día de clases no celebradas, pues la concesionaria tuvo que contratar a dos madres para hacer los trabajos diarios de reparto y seguimiento de las comidas. "Sabemos por ellos que estuvieron aquí, y sabemos también que a la propia empresa no le interesa esta labor, así que no podemos entender qué llevó a la Consellería a tomar esta decisión", ha señalado Álvarez.

Medidas de presión

El próximo lunes día 15 de septiembre, los padres y madres se reunirán para acordar nuevas "medidas de presión pacificas" para instar a la Consellería a hablar con ellos sobre el problema que desconocen y las posible soluciones.

Según el portavoz, los padres no entienden que se quiera cambiar un servicio diario de calidad en comidas elaboradas con productos de la zona, por otro llegado de tan lejos y más caro, según los datos que manejan.

Ha subrayado también que el colegio estuvo a punto de cerrarse hace unos años pues quedó con solo 14 alumnos. "Pero ahora cuenta con 22 y a pesar de que marcharon tres en este curso, llegaron otros seis escolares nuevos así que el comedor es más necesario que nunca, y cuando eran 14 a nadie se le ocurrió ver problemas con el mantenimiento del comedor y de la cocina", ha contrapuesto.

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