Escuelas Católicas comienza el curso pidiendo "diálogo" a las administraciones

Escuelas Católicas de Andalucía (ECA), organización patronal que aglutina a la mayoría de los titulares de los centros educativos católicos de la comunidad andaluza, comienza este nuevo curso escolar pidiendo "diálogo" a las administraciones para evitar que "sus diferencias políticas las paguen los alumnos y las familias andaluzas en las aulas".

Escuelas Católicas de Andalucía (ECA), organización patronal que aglutina a la mayoría de los titulares de los centros educativos católicos de la comunidad andaluza, comienza este nuevo curso escolar pidiendo "diálogo" a las administraciones para evitar que "sus diferencias políticas las paguen los alumnos y las familias andaluzas en las aulas".

En una nota, ECA ha indicado que este miércoles ha comenzado el curso sin incidencias y "con total normalidad" en los 413 centros con que cuenta la patronal en toda Andalucía, en las que acuden a clase unos 225.000 alumnos que son atendidos por más de 13.000 profesores, a los que hay que sumar otros 3.000 empleados no docentes.

El curso comienza marcado por la aplicación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) y las dificultades de la Junta de Andalucía a su desarrollo, "lo que ha generado preocupación entre los padres y en los propios colegios, que han tenido que hacer un esfuerzo por adaptarse a los nuevos cambios a última hora".

El secretario autonómico de Escuelas Católicas de Andalucía, Carlos Ruiz, ha pedido "diálogo y sentido común" a ambas administraciones públicas, Gobierno central y Junta de Andalucía, "para evitar que sus batallas políticas se diriman en las aulas andaluzas, donde la verdadera guerra se debe librar contra los terribles resultados que ofrece la región en los informes PISA o en el fracaso escolar: todo lo demás es crear nuevos problemas en lugar de ofrecer soluciones, que es lo que necesitan los ciudadanos en estos momentos para salir de la crisis".

En ese sentido, Ruiz ha mostrado su "perplejidad" porque tanto la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, como su consejero de Educación, Luciano Alonso, cumplan ya un año en el cargo sin haberse dignado a recibir a este colectivo, que supone un 20 por ciento del sistema educativo en la comunidad. "Nosotros también valoramos y defendemos la educación pública, pero eso no debe suponer arrinconar a los colegios concertados, que siguen siendo la opción preferida por miles de familias en la comunidad por su indiscutible calidad y por la transmisión de unos valores cristianos", ha señalado el responsable de ECA.

Junto a ello, el colectivo ha mostrado su temor a los retrasos que se están produciendo por parte de la administración autonómica en determinados pagos a los colegios concertados, como en el caso de los correspondientes al segundo trimestre, unos 40 millones de euros, que no han sido abonados hasta hace apenas unos días. "Esa asfixia ha obligado a muchos centros a pedir créditos y endeudarse para estar al corriente en sus obligaciones y empezar el curso con normalidad", ha remarcado.

Por otra parte, ECA está realizando un "gran esfuerzo" por mejorar la calidad formativa en sus centros con numerosas iniciativas sobre innovación pedagógica y bilingüismo. De hecho, en solo un año son más de 100 los colegios concertados que se han acogido al prestigioso programa BEDA, por el que la Universidad de Cambridge evaluará y asesorará a estos centros para la implantación del inglés en las aulas.

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