La viceconsejera de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias, Manuela Armas, se ha reunido este miércoles con los representantes del profesorado y del alumnado del CEIP Boliche de Las Palmas de Gran Canaria, donde han ido los niños que tendrían que estudiar en el CEIP Siete Palmas, y les ha propuesto trasladar a los niños a otros centros.

Armas señaló que comparte con los padres su preocupación y entiende que "está fundamentada en que sus hijos a día de hoy no han comenzado las clases". De todos modos, recordó a las familias que la empresa encargada de las obras del nuevo colegio CEIP Siete Palmas "había asegurado tanto a la Consejería como a los padres que el día 30 de agosto la obra del colegio de Siete Palmas estaría en condiciones para acoger a los niños". "Es una situación nueva e inesperada a la que nosotros tenemos que darle salida", reconoció en un comunicado.

En este sentido, apuntó que han propuesto a los padres "trasladar a los niños del Boliche pero ellos tienen que decidir si son todos o sólo un par de niveles". "Hemos puesto a su disposición otros centros que se han cerrado el curso anterior, como pueden ser El Castilla o el Ramón y Cajal, con la opción además de encargarnos del traslado de los niños. Recogemos a los alumnos en el CEIP Boliche, los trasladamos en guagua y luego vuelven otra vez al mismo a la hora de la salida", subrayan.

Añadió que la ventaja es que estos dos centros que se les han ofertado tienen comedor en sus instalaciones, por lo que señaló "se da respuesta así al hándicap que las familias tienen respecto a que este servicio de comedor complementario tan necesario para ellos esté funcionando".