Mandatarios de todo el mundo conmemoran hoy en Moscú la derrota del nazismo

Con un despliegue de medidas de seguridad sin precedentes, Moscú se convirtió el lunes en el centro de las conmemoraciones del 60º aniversario del fin de la II Guerra Mundial.
Más de 60 jefes de Estado y de Gobierno conmemoraron el lunes en Moscú el 60º aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial, con un gran desfile militar en la Plaza Roja.
Más de 7.000 soldados y cerca de 2.500 ex combatientes rusos de la contienda participaron en la parada, celebrada en Rusia en homenaje a los 27 millones de rusos que perdieron la vida en la guerra más cruenta de la historia, el país que más víctimas tuvo.

Los actos, que culminaron con una visita a la tumba del soldado desconocido, estuvieron presididos por el presidente ruso, Vladímir Putin. La ceremonia comenzó justo cuando las campanas del reloj del Kremlin anunció las 10 de la mañana (8 de la mañana en España).

Una banda militar empezó a tocar para acompañar los pasos de tres soldados que cruzaron la plaza Roja portando la bandera del Ejército ruso, la misma que el ruso Mijaíl Yegórov y el georgiano Melitón Kantaria izaron sobre el Reichstag de Berlín hace 60 años, poniendo fin al régimen nazi de Alemania.

A continuación, el ministro de Defensa, Seguéi Ivanov, a bordo de una limusina descapotable ZIL, comenzó a pasar revista a las tropas apostadas en la Plaza Roja.

Tras ello, informó al "comandante supremo de los Ejércitos", el propio Putin, la disposición de las tropas a comenzar el desfile. Antes, el presidente ruso dirigió unas palabras a los participantes y asistentes, diciendo que Rusia "recordará siempre" la ayuda de EE UU, Gran Bretaña, Francia y los antifascitas alemanes e italianos para lograr la victoria sobre los nazis.

También pidió que "no se repita nunca una guerra fría ni ninguna guerra" y calificó la reconciliación entre Rusia y Alemania como uno de los "logros más importantes de la posguerra" en Europa.

También recordó que
en la Segunda Guerra Mundial se vieron involucrados 61 países y casi el 80% de la población del planeta.

Más de 60 mandatarios de todo el mundo asistieron a los acto, entre ellos el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que fue recibido por Putin, a su llegada a la Plaza Roja de Moscú. También asistieron al acto los presidentes de EE UU, George W. Bush, de Francia, Jacques Chirac, el canciller alemán, Gerhard Schröder, el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, el italiano, Silvio Berlusconi, o el de Israel, Ariel Sharon, así como el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan.

Todos ellos acompañaron al anfitrión, Putin, a la tumba del soldado desconocido, en el que se realizaron ofrendas florales para dar fin a los actos conmemorativos.

Por miedo a ataques terroristas, la ciudad estaba prácticamente blindada con unas medidas de seguridad sin precedentes. En las principales calles de Moscú había policías y soldados cada 50 metros.
Mostrar comentarios

Códigos Descuento