La plaza Primero de Mayo contará tras su remodelación con más de 250 árboles repartidos por distintas áreas de su superficie, con 6.000 flores, distintos tipos de plantas arbustivas y césped.

Así lo ha presentado esta mañana el concejal de Desarrollo Urbano, Pedro Sáez Rojo, en una comparecencia en la que ha trasladado detalles del acabado final de las zonas verdes y explicado los motivos técnicos que han conllevado la retirada de algunos ejemplares y el proceso seguido para intentar su posterior trasplante.

Sáez Rojo ha comenzado su intervención recordando el "deficiente" estado en el que se encontraba una plaza construida en 1984 y que desde la construcción del aparcamiento en 1994 no había sido remodelada.

Una actuación "largamente solicitada" por los vecinos y los propietarios de negocios de hostelería y comercios que finalmente se ha cumplido en este mandato.

Una reforma acometida mediante "un proceso participativo modélico, en el que todos los beneficiados han podido intervenir". Una posibilidad plasmada en las 385 propuestas "formuladas, valoradas por la comisión vecinal creada y trasladadas a los técnicos".

Con estas aportaciones finalmente se redactó el proyecto que desde noviembre se ejecuta en sus estrictos términos. "Excepto -ha explicado el concejal- con dos variaciones en el programa de trabajo para agilizar la ejecución de las bandas laterales y que las terrazas de las cafeterías pudieran instalarse para Semana Santa y adelantar la adecuación de los espacios de juegos infantiles para ser disfrutados en verano".

En ese proyecto se contemplaba ya la necesidad de retirar una serie de árboles por determinados motivos. En concreto Sáez Rojo ha hecho entrega de unos informes técnicos como el elaborado por el Parque de Bomberos indicando la necesidad de retirar 81 ejemplares ubicados en recorridos de la plaza que impedían el "rápido acceso, colocación y maniobra de los vehículos autoescala a las viviendas en caso de incendio o siniestro grave".

Además, tal como ha ido desgranando del documento elaborado por la Dirección de Obra, ha habido que retirar otros doce por estar próximos a la estructura del estacionamiento subterráneo y resultar imprescindible para garantizar su adecuada impermeabilización. Una cantidad a la que se suman otros cinco árboles dañados a consecuencia del vendaval del mes de mayo; "de los cien que se cayeron en todo Logroño, cinco fueron aquí". Asimismo, está previsto trasladar 8 ó 10 más al afectar a conexiones de distintos servicios. Son en total 108.

Tratamiento para el mantenimiento de los árboles

Como se establece en la certificación de obras y ha confirmado el concejal, los árboles retirados fueron trasplantados por la empresa que ejecuta las obras. Cuatro de ellos directamente en el parque de La Grajera y el resto al vivero de la citada empresa o a otras fincas agrícolas en donde están siendo sometidos a tratamiento para intentar su posterior replantación en la misma plaza Primero de Mayo.

Como ha señalado Sáez Rojo, "los informes del contratista sobre el estado vegetativo de los árboles nos llevan a ser optimistas" aún con la convicción de que "es una labor muy delicada, con árboles de gran porte que han estado muchos años en un ambiente urbano, que tienen el sistema radicular muy dañado". Se calcula que unos 15 árboles podrían ser replantados.

Finalmente, con el proyecto en la mano, el concejal de Desarrollo Urbano ha detallado que la plaza contará en la zona más cercana a la calle Chile con 73 árboles al norte y 88 al sur. En el espacio hacia la calle Lardero, 24 al norte y 12 al sur. Estos hacen un total de 203 a los que hay que sumar los 47 del bosque de pinos central -"una zona a la que se va a dotar de un tratamiento especial, con pavimento de granito reutilizado de la Gran Vía".

Definitivamente la plaza dispondrá de 250 árboles, al menos porque "posiblemente se pueda incorporar alguno más".

Proyecto en ejecución

En todo caso, ha insistido Pedro Sáez Rojo, "se plantarán cuando los técnicos estimen que es la mejor época de plantación". Teniendo además en cuenta que las obras tienen plazo de ejecución hasta el mes de marzo, aunque las previsiones del Equipo de Gobierno apuntan a que ya en diciembre pueda disfrutarse la urbanización de la superficie de la plaza. Quedando espacios aledaños y detalles para los primeros meses del año.

Sáez Rojo ha insistido en la imposibilidad de juzgar un proyecto que se está ejecutando, que está en obras y en el que por tanto faltan las plantaciones, el césped, el mobiliario urbano, los elementos para que los mayores puedan hacer ejercicios, etc.

En su opinión, las constantes críticas recibidas por parte de la oposición desde el inicio del proceso y por los más diversos aspectos únicamente obedece a que "lo tienen en el debe porque ellos lo prometieron y no lo cumplieron".