La presencia de animales en la isla mantiene la esperanza de encontrar a los desaparecidos en Indonesia

La expedición promovida a la isla de Sangeang por las familias de Víctor García Montes, nacido en Sevilla hace 43 años y procurador en los tribunales de Madrid, y de su amigo Jorge, ambos desaparecidos en el marco del hundimiento de una embarcación que navegaba entre las islas indonesias de Lombok y Komodo, ha alcanzado este sábado la zona norte de la isla y, en una primera inspección, han constatado la presencia de animales y, por tanto, "debe haber agua y comida", lo que mantiene la esperanza de encontrarlos con vida, según han informado a Europa Press fuentes de la familia García Montes.

La expedición promovida a la isla de Sangeang por las familias de Víctor García Montes, nacido en Sevilla hace 43 años y procurador en los tribunales de Madrid, y de su amigo Jorge, ambos desaparecidos en el marco del hundimiento de una embarcación que navegaba entre las islas indonesias de Lombok y Komodo, ha alcanzado este sábado la zona norte de la isla y, en una primera inspección, han constatado la presencia de animales y, por tanto, "debe haber agua y comida", lo que mantiene la esperanza de encontrarlos con vida, según han informado a Europa Press fuentes de la familia García Montes.

"Por primera vez y tras intentarlo en tres días consecutivos, hoy tres de los hermanos de los desaparecidos han conseguido alcanzar la isla por la zona norte, precisamente donde tanto los pescadores —que avistaron mientras navegaban por aguas del norte de la citada isla a dos hombres llegar a la playa— como los supervivientes del naufragio apuntan que podrían haber llegado a tierra", han explicado las citadas fuentes.

"La lógica y la información nos dice" que a una parte de la zona norte de la isla es a la que habrían llegado a nado tanto Jorge como Víctor. Así, tres hermanos de los desaparecidos han conseguido alcanzar esa zona geográfica en barco y realizar una primera inspección, constatando que esa área cuenta con "muchas rocas", lo que hace "difícil" encontrar una entrada a la isla, sobre todo, "descalzos como iban ellos".

Paralelamente, un helicóptero, que forma parte de la expedición de búsqueda montada por las familias, ha dado una vuelta para observar la misma zona norte de la isla —donde las familias asumen que deberían haber llegado Víctor y Jorge—, percatándose de la presencia de animales, por lo que "debe haber agua y comida, aunque no hay constancia de fuente alguna de agua".

Una vez se ha puesto el sol, el helicóptero y el barco en los que han inspeccionado la isla han vuelto al campamento base para planificar la estrategia de búsqueda para este domingo. En este sentido, las citadas fuentes han asegurado a Europa Press que, en base a estos hallazgos y a los testimonios de la gran mayoría de supervivientes, "muy colaboradores", van a solicitar a las autoridades de Indonesia que amplíen el plazo de búsqueda, que inicialmente y según apuntan las familias era de siete días tras el naufragio.

"Los familiares, aunque somos conocedores de que las condiciones son muy duras y han pasado muchos días, queremos inspeccionar toda la isla y mantenemos las esperanzas y expectativas de encontrarlos con vida", han afirmado, al tiempo que han añadido "si han llegado a la isla y han encontrado un acceso, sabemos que hay comida y agua porque hay animales".

En esta línea, las familias han señalado que el Gobierno de España está haciendo "todo lo posible" para que Indonesia acepte la ampliación de la búsqueda. No obstante, las dos familias, con ayuda estatal del país asiático o no, tienen la idea de volver a entrar este domingo en la isla.

Las fotografías de víctor garcía

Tanto la familia de Víctor García Montes como Jorge, además, reiteran en su ruego a los medios de comunicación para que se abstengan de usar y difundir las fotografías de Víctor que circulan en las redes sociales, así como la de los familiares en las tareas de búsqueda, pues desean mantener el anonimato.

El barco naufragado cubría una ruta entre Labuhan y Pulau Komodo cuando, a las 13,00 horas del sábado (8,00 hora peninsular española) y bajo el castigo de una fuerte tormenta, encalló en una barrera coralina y finalmente volcó sobre las 19,00 horas, según el coordinador de la Oficina de Búsqueda y Rescate de Bima.

En la embarcación, según han informado a Europa Press fuentes de la familia de Víctor García Montes, viajaban cinco tripulantes y 20 turistas, entre ellos este procurador sevillano de 43 años de edad y su amigo Jorge. La familia de Víctor García Montes, que conecta el naufragio de la nave con la avería sufrida por los motores de la misma, ha explicado que cuando la embarcación finalmente comenzó a volcar, los náufragos decidieron echarse al mar en el único bote de salvamento de la embarcación e intentar alcanzar una isla que se divisaba en el horizonte.

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Nado hasta la isla

Dado que el bote sólo contaba con capacidad "para cuatro personas", siempre según el relato de la familia del procurador, basado en el testimonio de uno de los náufragos rescatados, organizaron una serie de "turnos" para navegar sobre el bote o nadar a su lado. Ante la lenta "progresión" del bote, varios de los náufragos se habrían desligado del mismo para alcanzar la isla a nado, por su propia cuenta, una iniciativa que fue seguida por "un segundo grupo", siendo todos éstos "rescatados" tras alcanzar el sur de esta isla.

Víctor García Montes y Jorge habrían permanecido no obstante junto al bote, en el agua, pero cuando un barco pesquero llegó hasta el mismo y, al rescatar a los restantes náufragos, se comprobó que habían desaparecido, comenzó a cobrar fuerza la hipótesis de que al acercarse la caída de la noche, hubiesen decidido alcanzar también la isla nadando en solitario. No obstante, las citadas fuentes señalan que en aquellos momentos, una fuerte "corriente" derivada de las adversidades meteorológicas podría haber "arrastrado a ambos hacia el norte, hacia aguas abiertas".

Pero las familias de Víctor García Montes y Jorge se aferran al testimonio de unos pescadores que habrían trasladado a las autoridades locales que mientras navegaban por aguas del norte de la citada isla avistaron "a dos hombres, dos turistas", que habían llegado a la playa procedentes del mar, porque esta isla en cuestión, de 13 kilómetros cuadrados y coronada por un pico de unos 1.900 metros de altura, "está deshabitada" en ese sector.

Aunque las autoridades locales defienden que la isla ha sido "batida" ya sin encontrar rastro de ellos, la familia de Víctor García Montes explica que él y su amigo Jorge cuentan con "mucha experiencia en la montaña y en el mar", con lo que con toda probabilidad "han entrado en la isla, en el bosque, a buscar agua". "Son personas muy preparadas física y mentalmente", dice la familia de Víctor.

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