Detenida una empleada del hogar acusada de sustraer joyas valoradas en 20.000 euros a dos ancianos

La Policía Nacional ha detenido a E.R., una mujer de 36 años natural de Rumanía, acusada de haber sustraído hasta 20.000 euros en joyas de un domicilio en el que trabajaba como empleada del hogar, según se desprende de la investigación realizada por la Policía Nacional tras la denuncia del hijo de las víctimas, dos personas de avanzada edad.

La Policía Nacional ha detenido a E.R., una mujer de 36 años natural de Rumanía, acusada de haber sustraído hasta 20.000 euros en joyas de un domicilio en el que trabajaba como empleada del hogar, según se desprende de la investigación realizada por la Policía Nacional tras la denuncia del hijo de las víctimas, dos personas de avanzada edad.

En una nota, la Comisaría ha indicado que la mujer ha sido acusada de un delito de hurto por sustracción de joyas de forma continuada, de forma que posteriormente vendía las mismas en lotes. Los investigadores han logrado recuperar la mitad de las joyas robadas, nueve piezas valoradas en 10.000 euros.

No obstante, no todas las joyas han podido ser recuperadas por haber transcurrido el periodo legal de conservación, de 15 días, al que están obligados este tipo de establecimientos de compra-venta de oro. Los hechos se produjeron cuando el pasado día 9 se presentó una denuncia por parte del hijo de las víctimas, en la que afirmaba que, del domicilio de sus padres se habían producido continuas sustracciones de joyas.

Los agentes realizaron distintas gestiones que permitieron considerar como presunta autora a la mujer que ejercía labores de empleada de hogar en la vivienda en la que prestaba sus servicios al cuidado de un matrimonio de avanzada edad y con movilidad reducida.

Además, se pudo comprobar que gran parte de las joyas habían sido vendidas en tres operaciones diferentes en casas de compra-venta, desde mediados del pasado mes de junio, fecha en que empezó a trabajar la ahora detenida en dicho domicilio y que todas las ventas habían sido efectuadas por ella, recibiendo en total 10.000 euros. Muchas de las piezas de joyería habían sido malvendidas debido a que las mismas llevaban piedras preciosas que no han sido pagadas.

Los investigadores ha llegado a la conclusión que la detenida E.R., ha llegado hacer su 'modus vivendi' de esta actividad delictiva, pues en el mes de mayo de 2010, ya fue imputada por varios hurtos continuados de robo de joyas en domicilios donde trabajo bajo la misma forma de actuar.

Las investigaciones han sido realizadas por el Grupo V de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Almería.

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