La primera teniente de alcalde de Torredembarra (Tarragona), Francisca Felguera (CiU), detenida la semana pasada por la Guardia Civil y en libertad con cargos por delitos contra la administración, ha asumido la alcaldía accidental este lunes tras la renuncia del tercer teniente de alcalde y también imputado, Ignasi Duran (Grupo Independiente), después de que su partido rompiera el pacto de gobierno municipal y dejara en minoría a CiU y PP.

El alcalde, Daniel Masagué (CiU), sigue en prisión provisional por la misma operación, en la que fue detenido por delitos contra la administración, junto con seis concejales del equipo de Gobierno y un empresario del municipio. Precisamente, los sindicatos de la prisión de Tarragona han denunciado este lunes el trato de favor "inadmisible y discriminatorio" que recibe, pues ha recibido visitas que vulneran la normativa de la cárcel.

Los sindicatos CSI-CSIF, CATAC, UGT y CCOO han asegurado que la directora accidental del centro penitenciario y la subdirectora de tratamiento ha permitido más visitas de las establecidas: una única comunicación en fin de semana de 45 minutos. Esta se realizó el domingo pero este lunes el alcalde ha recibido una nueva visita en un despacho habilitado para encuentros con abogados en lugar de hacerlo en los locutorios generales. Por eso, piden al Departamento de Justicia la apertura de una investigación para depurar responsabilidades.

Por otro lado, el concejal del PP imputado —el partido ya lo ha suspendido de militancia— y segundo teniente de alcalde, José Oviedo, ha renunciado a su acto de regidor para centrarse en demostrar su "inocencia". Además, "no quiero perjudicar con todo este proceso ni al municipio de Torredembarra ni al PP", ha aducido en un comunicado, en el que ha agregado: "He estado en política por vocación de servicio al ciudadano y no me quiero aferrar a ninguna silla puesto que, a pesar de estar en política, nunca he dejado mi trabajo profesional al margen".

La oposición quiere más renuncias. El portavoz municipal del PSC, Jordi Solé, ha explicado que los grupos políticos a la oposición —socialistas, ERC y Alternativa Baix Gaià (ABG)—, reunidos este domingo para abordar el futuro del consistorio, no negociarán con los regidores imputados —siete, incluyendo el alcalde, encarcelado provisionalmente— o que continúen formando parte del gobierno local. "No participaremos en nada con un gobierno donde haya un miembro imputado", ha declarado.

La única regidora de CiU no imputada, Rosa Maria Guasch, también se ha mostrado partidaria de formar un gobierno sin presencia de los imputados y ha pedido a sus compañeros detenidos que dimitan. Asegura que ella denunció también irregularidades a la propia Federación de CDC al Camp de Tarragona, infructuosamente, y considera que Massagué, Felguera y el edil Santiago Ardèvol (CiU) son los principales responsables de la situación.

La regidora de ERC Montse Gasull y Rachid Al Ghzaoui, extrabajador de una empresa del alcalde, han dado detalles de la denuncia que presentaron a la Guardia Civil. En su opinión, todos los concejales conocían las irregularidades orquestadas por el equipo de gobierno, en una trama de corrupción que esconde "cifras millonarias", en favor de varias empresas. "Se hubiera podido evitar y el gobierno no estaría imputado", ha afirmado la republicana, quien ha confesado sentirse "sola" y "presionada" en relación a este escándalo, y sin el apoyo de su partido.

"Hablamos de muchos millones de euros de dinero público presuntamente malversados pagados a empresas sin fiscalizar por parte del Ayuntamiento, gastos innecesarios, contrataciones dudosas, carísimos informes externos, contratación de numerosos abogados, adjudicaciones directas, pagos sin contratar y un largo etcétera", ha añadido Gassull, que se ha mostrado prudente ante el secreto de sumario sobre este caso de corrupción.

Tras ser despedido, Al Ghzaoui denunció los "movimientos extraños de dinero" que había presenciado a lo largo de los 24 años que trabajó por la empresa. Sin querer confesar de qué ha acusado exactamente el alcalde, con un hilo de voz ha reconocido que muchos sabían, de estas supuestas irregularidades. "Primero se lo dijo a un regidor del gobierno, pero este no se vio capaz y lo derivó a mí", ha asegurado Gassull.

"Toda esta trama viene de la administración pública, está a los juzgados, se están investigando muchas causas y ya veremos como acaba", ha afirmado. "La cosa es muy gorda y apenas ahora empieza", ha concluido. Las denuncias que presentó ante la Guardia Civil junto a Al Ghzaoui han precipitado la operación policial y el encarcelamiento del alcalde —que ya lleva tres noches en la prisión de Tarragona— y la imputación de seis regidores de su equipo de gobierno —de CiU y PP— y de un empresario local muy vinculado a Masagué, que regentaba un restaurante. En paralelo, sigue su curso la denuncia que los grupos de ERC y PSC presentaron conjuntamente al Ministerio Fiscal por varias irregularidades como por ejemplo el elevado alquiler de unos locales y los pagos a la consultora Effial.