El nuevo Plan de Desarrollo Regional (PDR) de Cantabria para el periodo 2014-2020 priorizará, entre otras medidas, la incorporación de jóvenes al sector primario, la consolidación del crecimiento que vive la industria agroalimentaria, la ejecución del Plan Forestal para convertir la producción de madera en un eje estratégico generador de empleo y riqueza, así como las ayudas a las explotaciones de alta montaña, al reforzarse la dotación de la Indemnización Compensatoria.

Así lo ha dicho la consejera cántabra de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Blanca Martínez, que ha presidido este jueves una sesión de trabajo de la Mesa Regional Agraria para avanzar en el consenso articulado en torno al borrador del Plan, que debe ser firme antes del próximo 22 de julio. Previamente se volverá a convocar la Mesa para evaluar una simulación sobre la aplicación de algunas propuestas realizadas hoy por las organizaciones profesionales, ha informado el Gobierno en un comunicado.

Martínez informó también de las especificidades del Régimen de Pago Base, que cambia con respecto al aplicado en el periodo 2007-2013, así como defendió el mantenimiento de pagos acoplados para generar equilibrio entre rentas y la comarcalización que imponen los reglamentos comunitarios, de forma que queden agrupados aquellos territorios que acogen perceptores con similares volúmenes de ayudas.

A juicio de la consejera, el nuevo PDR debe ser capaz de "afinar" la batalla contra los cazaprimas, ponderar al agricultor a título principal y, al mismo tiempo, debe servir para simplificar la gestión y establecer criterios "reales" para acceder a las ayudas que corrijan las deficiencias acreditadas en el actual periodo. Se trataría de evitar que una inspección comunitaria pueda traducirse en un recorte de fondos "que son indispensables para garantizar la renta de nuestros productores. Debemos ser exquisitos en responsabilidad porque es mucho lo que nos estamos jugando".

Martínez también adelantó la creación de una nueva línea de fondos, bajo el genérico 'Bienestar Animal', que permitirá mantener en el futuro las ayudas que actualmente se conceden por la recría de novillas y el decreto ferrari a reses puras. Además, será compatible con la percepción de la subvención para el mantenimiento de razas que trata de evitar la desaparición de especies en peligro de extinción, caso de la tudanca, la monchina y la pasiega.

Finalmente, la consejera, que dio cuenta del avance experimentado en sanidad animal -la brucelosis cerró 2013 con una prevalencia del 0,33% en ganado bovino, y sin afección en ovino y caprino-, se comprometió a trasladar al Ministerio de Agricultura la necesidad de revisar al alza la cuantía de la indemnización que compensa el sacrificio de reses positivas en campaña.

De igual modo, ante la reiterada petición del presidente de Asaja, Pedro Gómez, Martínez analizará la oportunidad de convocar una Mesa Regional Láctea para abordar las tensiones que, según relató la organización sindical, se dirimen actualmente entre la cooperativa Agrocantabria y una industria láctea asentada en la comunidad.