Los representantes de CCOO en los Consejos de Administración de BBK y Vital se han abstenido este jueves en la votación por la que se ha aprobado la transformación de ambas cajas en fundaciones bancarias. Además, han mostrado su preocupación por cómo se está desarrollando el proceso.

En un comunicado, CCOO ha dicho ser consciente de que dicho cambio a fundación viene impuesto por una ley de cumplimiento imperativo (la Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias 26/2013 de 27 de diciembre) que exige la transformación de las cajas de ahorro que habían traspasado el negocio a un banco en fundaciones bancarias.

Para el sindicato, esta ley "busca reducir el control y la participación pública en las entidades financieras. Además, no prevé situaciones para entidades como las vascas, que cuentan con una situación solvente, demostrando que no era necesariamente ineficaz el modelo de cajas, sino la gestión de las mismas".

Puesto que dicha transformación es obligada, el interés de CCOO se centra en el compromiso "ineludible" con la obra social y sus líneas generales de actuación, en el control y participación social de la propia fundación, y en compromisos para mantener el control social de Kutxabank. Desde CCOO no quieren que, aprovechando las circunstancias, lo que debe ser un proceso obligado de transformación, "derive en otra cosa".

En estos momentos, CCOO considera "insuficientes" las garantías para que se mantenga la obra social como fin principal de las fundaciones, y el control social de las mismas. Y por ello desde el sindicato no avalan el nacimiento de la fundación bancaria, sus estatutos y su patronato.

En ese sentido, los consejeros de CCOO se han abstenido en las votaciones, trasladando que alcanzar o no el compromiso que se detalla a continuación, orientará el voto en las posteriores asambleas de las cajas.

CCOO insta al futuro patronato de las fundaciones a cumplir con el siguiente acuerdo: Los patronatos deberá velar por la continuidad de la obra social y será esta siempre su principal finalidad; las Fundaciones de BBK y Vital deberán destinar la mayor cantidad posible del dividendo obtenido por sus acciones en Kutxabank a la obra social, teniendo siempre en cuenta criterios de prudencia en la gestión y asegurando la solvencia y futuro de la propia fundación.

Además, defiende que el objetivo principal de la obra social de las fundaciones será: Apostar prioritariamente por la lucha contra la pobreza y la inclusión social como compromiso con la sociedad más desfavorecida; Apostar por la formación y la inserción laboral de la juventud como compromiso con el empleo y; Apostar por la defensa de las plantillas de la obra social.

En la composición de los patronatos, CCOO exige que se atienda siempre a la pluralidad de la sociedad y a criterios de profesionalidad.

Por último, pide que las fundaciones de BBK y Vital, teniendo en cuenta que la prioridad es garantizar la obra social, gestionen de manera eficiente el patrimonio y la participación en Kutxabank, para tratar de mantener la estructura accionarial actual del banco vasco, "teniendo claras las limitaciones de las diferentes normativas regulatorias y legales".

En el caso de que deba procederse a algún tipo de desinversión, pide que se busquen fórmulas que permitan mantener la participación social en el accionariado de Kutxabank.