El líder de UDC, Josep Antoni Duran, ha justificado este lunes la abstención de CiU en la ley de abdicación del rey Juan Carlos a favor del príncipe Felipe por haberse excluido a la formación en su elaboración.

En un artículo de opinión publicado en La Vanguardia, Duran ha hablado de razones de "forma y fondo" y ha expresado el malestar de la federación por haber sido informada del contenido de la ley sin permitirle participar en ella.

El diputado de CiU en el Congreso ha sostenido que el debate desatado tras el anuncio de abstención de su grupo ha sido "en parte distorsionado por unos y otros", aunque ha añadido que entiende a quienes no lo comprenden.

"Cuando se quiera un pacto de Estado se tiene que invitar a participar en la cocina para hacer el plato, y no sólo en el comedor para ingerirlo", ha considerado.

Duran ha afirmado que CiU no puede hacer "como si no pasara nada" cuando Felipe VI heredará como rey un Estado que trata a Cataluña injustamente, algo que, según sus palabras, el futuro monarca sabe.

De él ha dicho que es un buen augurio su presencia habitual en la comunidad, el respeto al catalán, "hablándolo con fluidez", y la obra de la Fundació Príncep de Girona.

Sobre la figura de Juan Carlos I, hace un balance positivo, aunque le habría gustado "más claridad en sus posicionamientos públicos sobre Cataluña".

Duran ha sido noticia este fin de semana tras saberse que está considerando la posibilidad de dejar de ser secretario general de CiU, hecho sobre el que se ha pronunciado este lunes el presidente del Congreso, Jesús Posada.

Posada ha considerado que será "un golpe fatal" y que el presidente de la Generalitat —y de la formación—, Artur Mas, debe "reflexionar seriamente".

"Mal camino; creo que Artur Mas debería reflexionar seriamente adónde estamos yendo para que un hombre como Duran no pueda ser portavoz de CiU, yo lo veo un tema grave", ha dicho en una entrevista en la Cope.

El presidente de la Cámara baja considera que Duran ha hecho "una labor muy buena" representando a CiU, porque ha expresado un poco "las dudas" que existen en Cataluña, donde hay "sentimientos independentistas", sentimientos de "patriotismo español" y "una gran masa de gente que oscila.

Posada también se ha declarado muy preocupado por la consulta independentista convocada para el 9 de noviembre y, como presidente del Congreso, ha defendido la posición de la Cámara, que rechazó por amplia mayoría ceder a Cataluña la posibilidad de convocar un referéndum.