Quedan menos de 24 horas para que termine la campaña electoral y el PP y el PSOE celebran sus últimos mítines antes de que comience la jornada de reflexión. Los dos grandes partidos no han cambiado su discurso en el sprint final: los socialistas han seguido explotando el comentario machista del cabeza de lista popular tras el debate con Elena Valenciano, mientras que el Partido Popular ha seguido apelando a la herencia recibida por el Gobierno de Rajoy tras las elecciones de 2011.

La cabeza de lista del PSOE al Parlamento Europeo, Elena Valenciano, ha sostenido este jueves que el próximo domingo los españoles tienen que decidir si quieren "una Europa solidaria, sensible e inteligente o una Europa egoísta" y si apuestan "por la justicia social o por la tiranía del dinero". En un mitin en Zaragoza ante cerca de 2.000 personas, en el que ha vuelto a encontrarse con el secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, la candidata ha dicho también que el domingo se apuesta "o por la Europa que siempre hemos soñado o por esta Europa fría, cruel que nos propone la derecha".

Valenciano, que ha vuelto a defender la necesidad de que Europa de un "giro a la izquierda" ha pedido una vez más el voto "para que ganen los que sufren y pierdan los que les hacen sufrir".

Junto a ella Rubalcaba ha dicho que tiene la "confianza ciega" en que los socialistas van a ganar, porque los españoles han "visto por dentro" a Valenciano y a Cañete y han podido comprobar que sólo ella "da la cara" y "mira de frente". "Nosotros hemos podido cometer errores, sin duda, pero siempre hemos dado la cara", ha defendido el líder del PSOE.

"Las campañas son una radiografía, al final te ven por dentro y tengo una confianza ciega en ganar porque los españoles han visto por dentro a Elena y a Cañete, por eso sé que vamos a ganar", ha afirmado. Según Rubalcaba, "con eso del machismo", en referencia a las polémicas declaraciones del candidato popular en una entrevista, se olvida lo que pasó el día anterior en el debate en TVE entre Valenciano y Cañete, en el que "una daba la cara y miraba de frente y el otro se escondía detrás de los papeles".

A tres días de la votación, el líder del PSOE ha hecho también hincapié en que el PSOE es "el único partido que puede impedir que estas elecciones sean un cheque en blanco a Rajoy para que siga recortando". "Pedimos el voto para evitar que Rajoy siga haciendo lo mismo y lo pedimos con rotundidad", ha señalado.

Tras asegurar que el PP va a perder "porque han sido muy duros con gente que no conocen", ha pedio también el voto para defender la dignidad de las mujeres, contra los nacionalismos excluyentes y para defender la sanidad y la educación públicas y los derechos de los trabajadores.

Un Rubalcaba, que ha dicho sentirse más cerca de los trabajadores europeos "que del empresario de la esquina", ha insistido en que populares y socialistas no son "lo mismo" y en que ellos no tienen "sobres, sólo papeletas con puños y rosas". "Queda poco tiempo, está la cosa en un pañuelo, dependemos de nosotros, está en juego la realidad de nuestro país", ha sentenciado Pérez Rubalcaba, que ha alabado la "sensibilidad" y el "trabajo" de Elena Valenciano.

Con Valenciano y Rubalcaba ha estado el líder de los socialistas aragoneses, Javier Lambán, que se ha referido a Arias Cañete como el "trasvasista mayor de la historia", además calificarle de "misógino", "machista", "xenófobo", "prepotente" y "autoritario", mientras que la también candidata Inés Ayala ha llamado a los presentes a sacar el domingo "tarjeta roja" al PP.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha cerrado esta noche en Málaga su penúltimo mitin de esta campaña electoral en el que ha vuelto a pedir el voto para el PP porque no se pueden repetir en Europa, ha señalado, las políticas de los socialistas que llevaron al país "al borde del rescate y de la quiebra". Rajoy ha advertido de que él piensa "aguantar", pese a lo que le digan, y seguirá haciendo "lo posible y lo imposible" para sacar a España del "hoyo" en el que le metieron los "irresponsables" de los socialistas.

Rajoy ha recurrido a las pensiones para insistir en que no se puede votar a los socialistas. Así, tras señalar que su Gobierno ha aprobado una ley que garantiza la revalorización de las pensiones, ha apuntado: "No podemos permitirnos que triunfen las ideas que las congelaron y las pusieron en peligro". Mariano Rajoy ha reiterado que el PSOE tiene que seguir una "larga temporada" en la oposición, debe intentar "renovar sus ideas" y empezar a hablar "de lo importante".

También ha pedido el apoyo al PP para que España siga siendo, ha dicho, "una nación unida, moderada y seria". El voto al PP, ha continuado, es "el voto de la moderación, de la sensatez, de los dirigentes cuyo esfuerzo y trabajo marcó el camino de Europa" en las últimas décadas.

El jefe del Ejecutivo ha seguido reprochando al PSOE la campaña electoral que está haciendo. Ha apuntado que sus adversarios socialistas "no hablan de Europa, ni de economía ni de empleo, debe ser que no les interesa". "Y además no quieren que los demás demos buenas noticias. Pues yo voy a hablar de Europa, de economía, de crecimiento y empleo, y voy a dar buenas noticias, porque es lo que quieren todos los españoles", ha subrayado.

El cabeza de lista del PP, Miguel Arias Cañete, ha asegurado este jueves que él no esconde "la bandera de España como ha hecho la señora Valenciano" y que los 'populares' la van a "pasear por la Unión Europea porque es símbolo de la unión de las 17 comunidades autónomas y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla".

Según Cañete, la bandera española es símbolo de "unión" y de "lo que nos une" a todos los españoles, por lo que ha pedido el voto para el PP por considerar que es el único partido que puede ser "fuerte en la Unión Europea" y conseguir que España, a diferencia de años anteriores, "sea parte de la solución" y no del problema.

El 'popular', que ha ensalzado la recuperación económica iniciada en España gracias, en su opinión, a las medidas del Gobierno, ha aprovechado sus reflexiones acerca del empleo para afear a la candidata socialista y cabeza de lista a estas europeas, Elena Valenciano, que estuviera en silencio mientras que "900 mujeres al día iban al paro". "¿Dónde estaba entonces?", se ha preguntado para advertir de que se trata de una "pedazo de progre" al igual que todos aquellos que "le han dejado telarañas y un pufo de 7.700 millones de euros" a Rajoy y a la ministra Fátima Báñez, de la que ha dicho que es "una pedazo de mujer y con valor".

En esta línea, Cañete ha defendido las "reformas estructurales" que ha puesto en marcha el Gobierno de la Nación "sin pensar en el coste electoral" que podían tener y ha asegurado que, gracias a ellas, se ha "reconstruido España" siempre con "una línea roja", la de no poner en riesgo las pensiones y la de "no congelarlas" como hicieron en su día los socialistas y como han hecho, según ha apostillado, los socialistas franceses.

"Hay que votar al PP para que el PSOE consiga una derrota de alcance incalculable", ha reiterado ante quienes "pusieron en riesgo las pensiones".