Un total de 2.821 vecinos han firmado un escrito en el que reclaman al Foro Ermua que deje de utilizar el nombre de este municipio vizcaíno para "criminalizar el diálogo y la pluralidad que caracteriza este pueblo", que ronda los 17.000 habitantes.

El Foro Ermua fue constituido con el objetivo de luchar de forma cívica contra ETA tras el secuestro y posterior asesinato hace diez años del concejal del PP en esta población Miguel Angel Blanco.

En la presentación de las firmas, Juantxu Díez y Pili Díez, dos de los ocho jóvenes promotores de la iniciativa, leyeron un comunicado en euskera y castellano, en el que recordaron que con la muerte de Blanco su municipio "sintió un terrible desgarro".

Los dos promotores de la iniciativa afirmaron que las 2.821 rúbricas pertenecen a residentes en Ermua con distintas ideologías, desde personas afines a la izquierda abertzale hasta militantes del PP, asegurando que "hay una identidad que se ha usurpado a nuestro pueblo para sembrar odio, crispación y atacar a todo el que esté por el diálogo".

Disputa política sobre el uso del nombre Recientemente, el segundo teniente alcalde de Ermua, José Luis Clemente censuró, en una carta escrita a título personal, que el Foro Ermua use el nombre de la localidad afirmando que "nuestro pueblo no se encuentra detrás de esta asociación, ni asume como suyas sus propuestas".

El portavoz del PP, Antonio López, ha declarado que su formación se encuentra en desacuerdo con la campaña porque "no refleja el sentir general de la ciudadanía de Ermua", tachando la iniciativa de "partidista"y organizada por "algún grupo satélite de un partido político".

El portavoz del PNV, Lorenzo Iturriagagoitia, negó que la colecta de firmas haya sido impulsada por algún grupo político, a la cual se adhirió personalmente porque el Foro Ermua "está prostituyendo el nombre" de esta localidad.

Iturriagagoitia recordó que, tras el "vil" secuestro de Blanco, la "inmensa mayoría" de la población de Ermua salió a la calle para reclamar su inmediata liberación y, tras su asesinato, los vecinos pidieron a los gobernantes que "hicieran algo para acabar con el terrorismo", recordando que la propia hermana del concejal asesinado, Mari Mar Blanco, pidió públicamente a los políticos que "dialogaran" para impedir la muerte de su hermano.