El piso en el que el actor Philip Seymour Hoffman murió a causa de una sobredosis de droga, en el barrio neoyorquino del West Village, vuelve a estar disponible en el mercado, y busca un inquilino que pague 10.500 dólares (algo más de 7.600 euros) al mes, informó el New York Post.
En el cuarto piso del número 35 de la calle Bethune, en un edificio construido en 1880 y rehabilitado en 1984, se alquila una amplia vivienda no apta para aprensivos y muy atractiva para los morbosos, pues allí perdió la vida el ganador del Oscar por Capote el pasado 2 de febrero.
Después de haber estado clausurada por las autoridades hasta esclarecer las causas de su muerte y tras haber sido convenientemente desinfectado, el piso ha subido más de 500 dólares respecto al alquiler que pagaba Hoffman, que era de 9.995 dólares mensuales, según el rotativo.
Esta vivienda, que tiene dos habitaciones y dos baños y que cuenta con nueve ventanas al exterior, techos altos, suelos de roble y chimenea, fue adonde el actor se trasladó después de que su pareja y madre de sus hijos, la diseñadora de ropa Mimo O'Donnell, le pidiera que se alejara de la familia hasta que superara su adicción a la heroína.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios