Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres personas en diversas localidades de Girona, que han ingresado en prisión o enviados a Francia por tener delitos pendientes, y han desmantelado una red de tráfico de drogas a la que le han requisado 608 kilos de hachís, informa este viernes la policía catalana.

En el operativo policial se intervinieron 19 fardos, que contenían 608 kilos de hachís, y se detuvo a tres hombres, uno de nacionalidad marroquí, de 28 años, y dos de nacionalidad francesa, de 29 y 34 años, respectivamente, como presuntos autores de delitos contra la salud pública, robo de vehículo, falsificación documental, resistencia y desobediencia.

Dos de ellos fueron detenidos en Blanes el pasado 11 de febrero y el otro, que se había escabullido del operativo policial, fue arrestado el 14 de febrero en Vilatenim. La investigación se inició el pasado 24 de julio, cuando se detectó una organización criminal que operaba desde varios almacenes próximos a la autopista AP-7 ubicados en localidades de la demarcación de Girona.

Los integrantes del grupo usaban vehículos sustraídos por todas partes de Europa para utilizarlos en el transporte de sustancias estupefacientes desde la Costa del Sol a Cataluña. En la primera fase de la investigación, los Mossos se centraron en identificar a las personas que podrían estar tras esta organización criminal, en qué localidades y cómo sustraían los vehículos que después les servían para transportar la droga y las eventuales rutas que estaban empleando.

A mediados de febrero, las indagaciones permitieron saber que la organización criminal investigada estaba preparando un transporte de hachís, por lo que los investigadores diseñaron un operativo policial paras interceptar este transporte, intervenir las sustancias estupefacientes y detener a los presuntos traficantes.

La operación policial se llevó a cabo el 11 de febrero pasado por en la autopista AP-7, a la altura de Catellbisbal (Barcelona), y los agentes consiguieron interceptar un vehículo de alta gama con las placas de matrícula sustraídas. Una vez identificadas las personas detenidas, los investigadores averiguaron que uno de los detenidos usaba documentación falsificada y tenía una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) con su identidad real.

Esta orden fue emitida por Francia en relación con una condena relacionada también con un delito de tráfico de drogas.

Tras declarar ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Blanes (Girona), el juez decretó el ingreso en prisión de uno de los dos arrestados en esta localidad el día 11 de febrero. El otro hombre fue trasladado a la Audiencia Nacional para su extradición a Francia y el detenido el 14 de febrero pasó a disposición del Juzgado número 8 de Figueres, que decretó su ingreso en prisión provisional sin fianza.