La española Katia Griffiths no pudo clasificarse para la final de 'halfpipe' de esquí libre de los Juegos Olímpicos de invierno de Sochi 2014, la primera final olímpica de esta disciplina, al acabar decimosexta en la ronda previa.

En la primera serie de la ronda clasificatoria Griffiths logró una nota de 54,40, que consiguió mejorar en la segunda hasta 56,60 hasta acabar decimosexta de 23 participantes y quedarse fuera de la final, reservada a las doce mejores.

"Me da rabia no meterme en la final. He tratado de asegurar para no caerme. Empìezo a encontrarme bien después de una lesión de espalda", explicó Griffiths en declaraciones que difunde el Comitè Olímpico Español.

En la final, tras avanzar con la tercera mejor puntuación, la estadounidense Maddie Bowman se convirtió en la primera campeona olímpica de esta disciplina. Bowman, de 20 años y dos veces ganadora de esta modalidad en los 'X-Games', fue la mejor en la final con una nota de 89,00 puntos.

La acompañaron en el primer podio del halfpipe la francesa Marie Martinod, mejor puntuación en la fase de clasificación y quinta en los pasados Mundiales, quien se colgó la plata con 85,40. El bronce fue para la japonesa Ayana Onozuka con una puntuación de 83.20 puntos.  La suiza Virginie Faivre, actual campeona mundial, acabó en la cuarta plaza con 78,00 puntos.