Un apartamento de alta calidad, 26 metros cuadrados de superficie, con todos los servicios incorporados (agua, luz y electricidad), un precio final de 30.000 libras esterlinas (unos 36.400 euros) y listo para habitar. Esa es la oferta revolucionaria del estudio Rogers Stirk Harbour and Partners (RSHP), encabezado por el multipremiado arquitecto inglés Richard Rogers, diseñador de la terminal T4 del aeropuerto madrileño de Barajas. La nueva "unidad habitacional", con un prototipo ya instalado y en uso, ofrece un "alojamiento autónomo y asequible" para los jóvenes que no pueden pagar una casa o afrontar los "altos costos del alquiler privado", dicen sus promotores.

Recién cumplidos los 80 años (en 2013)  y cada vez más radical en sus planteamientos, el diseñador del Centro Pompidou, el Millenium Dome, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y muchas otras obras deslumbrantes, nunca esquiva la responsabilidad moral. Hace unos meses, acaso con el convencimiento que sólo pueden ejercer los niños, los genios y los ancianos, declaró que no estaba dispuesto a aceptar ningún trabajo que le impida desarrollar la idea de que todo proyecto ha de "transmitir valores humanos y éticos". Parece dispuesto a cumplir la promesa presentando el Y:CUBE un apartamento cuyo precio final es un 40% menor al valor medio de mercado de la vivienda en Londres.

El apartamento cumple con creces todos los estándares de sostenibilidad y eficiencia energética de las leyes inglesas. En una prueba de tres semanas el prototipo mostró que le basta un gasto de 7 libras semanales (unos 8,5 euros) para mantener una temperatura estable de 20º durante las venticuatro horas del día y proporcionar luz eléctrica y corriente a todos los electrodomésticos básicos. Los diseñadores aseguran que la vida media de cada apartamento es de 60 años sin sufrir otros desperfectos que los derivados del uso.

Cada unidad, que se construye en ocho días y sale completa de fábrica —la instalación en el lugar elegido tardaría una semana—, está fabricada con un entramado de madera ecoeficiente patentada por la firma inglesa Insulshell, laminada, encolada, aislada y ensamblada a mano formando un marco estructural que sólo necesita dos tipos de rosca. Los apartamentos son un producto de la teoría modular [PDF] que Rodgers defiende desde hace años como única solución para afrontar la crisis de la vivienda y los precios desmesurados: los módulos pueden unirse unos a otros como los elementos plug and play periféricos de un ordenador y formar edificios de hasta ocho pisos de altura.

Los apartamentos son de "alta calidad", con cama doble y cuarto de baño separado de la estancia principal, que es una sala de estar con cocina americana. Tienen una alura de 2,5 metros, pero "lo más importante" es que son "baratos" y "se pueden construir más rápido" que las viviendas tradicionales.

El primer Y:CUBE ya está instalado. Fue un encargo de la división del YMCA en el Sudoeste de Londres para ofrecerlo como alternativa de alojamiento a personas sin techo o jóvenes que no puedan afrontar el precio de las rentas. El primer conjunto de unidades conectadas está previsto para finales de 2014: serán 36 apartamentos en el área de Merton. Los planos del apartamento están expuestos en la sede del YMCA y el estudio de arquitectura los cede sin derechos a quien desee emplearlos.

Andy Redfearn, director de Vivienda y Desarrollo del YMCA London South West explica: "Incluso para una persona joven con empleo, la combinación de los bajos salarios y los altos alquileres puede colocarte fuera del mercado". Las nuevas unidades son "una oportunidad importante para ofrecer vivienda genuinamente asequible para satisfacer la demanda cada vez mayor de viviendas en Londres, donde la demanda de viviendas está superando significativamente a la oferta y la ciudad necesita desesperadamente encontrar una solución que permita a los jóvenes tener un lugar que puedan llamar suyo como un paso hacia la vida independiente ".

Ivan Harbour, portavoz del estudio de arquitectura, destaca que el Y:CUBE ofrece "un generoso espacio, aislamiento excepcional, aprovechamiento de la luz del día y aislamiento acústico. Creemos que tiene muchas respuestas para hacer sostenible la vida urbana y el enfoque de la entrega de unidades totalmente equipadas podría cambiar la manera en que pensamos sobre la vivienda".