La Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural ha incorporado 470 hectáreas a la zona de regadío de Terra Alta (Tarragona), ha informado este martes en un comunicado.

Las obras, ejecutadas por la Comunidad de Regantes, abastecen 338 parcelas regables y suponen una inversión de casi 1,1 millones de euros, donde se incluye el coste de las obras que conducen el agua desde los hidrantes ya construidos hasta las parcelas y la instalación de las llaves de paso.

Las actuaciones, que cubren los municipios de Batea, Bot, Caseres, Corbera d'Ebre, la Fatarella, Gandesa, la Pobla de Massaluca y Vilalba dels Arcs, se iniciaron en 1997 y prevén la transformación de 8.200 hectáreas, de las cuales 7.016 ya son de regadío.