La defensa del diálogo entre Cataluña y España unió al president de la Generalitat, Artur Mas, y al ex presidente del Gobierno Felipe González; la celebración de un referéndum de autodeterminación fue la principal discrepancia. Mas y González se encontraron en un cara a cara televisado y conducido por el periodista Jordi Évole, la noche de este domingo.

El president Mas reivindicó de nuevo que "la consulta se hará, de una forma o de otra y siempre de acuerdo con un marco legal". El dirigente de CiU apostó por abrir un diálogo con el Gobierno de Rajoy, con el que no tiene contacto "desde finales del mes de agosto". "Yo no tengo su teléfono pero él me ha hecho saber que, sobre este tema que hoy en día polariza la oponión pública catalana, él no tiene nada que hablar", agregó.

Por su parte, Felipe González reiteró que "no es posible la independencia", añadiendo que "además, yo siento que no es deseable". El histórico dirigente del PSOE advirtió a Mas que "cualquier presidente del Gobierno español no va a dar ni un paso hacia el desencadenante del derecho de autodeterminación de los pueblos".

En todo caso, para González, se debería consultar a todo "el pueblo español" antes que a Cataluña y espetó a Mas: "si alguna vez hay que decidir, cosa que no deseo, yo creo que tengo tanto derecho a decidir como el presidente Mas".

Para el president de la Generalitat, en cambio, primero hay que saber "qué quiere el pueblo de Cataluña". "Una vez conozcamos el resultado, ese resultado obviamente exige una negociación", concluyó Mas.

González apeló a la Constitución repetidamente, a lo cual Mas contestó: "creo que ya hay, en este momento, una mayoría clara del pueblo catalán que no se siente representado por esa Constitución española".

El líder catalán apostó, en todo caso, por llevar a cabo una consulta acordada con el Estado, después de que González aseverara estar "seguro de que usted nunca incumplirá la legalidad vigente". Mas le recordó a González: "Que no se puede hacer una consulta, no lo dice la Constitución".

En otro momento del diálogo cara a cara, que logró ser trending topic en Twitter, Felipe González afirmó que los dirigentes de la UE "no es que sean neutrales" ante el proceso soberanista catalán, "es que están aterrados de pensar que se puede producir una desarticulación territorial interna respecto de los Estados nación que conforman la UE".

Ante la posibilidad de que Rajoy ofreciera a Mas un pacto fiscal, el dirigente catalán se negó en rotundo. Igualmente, Felipe González se indignó ante tal posibilidad: "Hay que ponerse de acuerdo en serio. No te cambio esa estampita por esta otra".

Mas recordó que, tras la gran manifestación de la Diada de 2012, fue a la Moncloa y "le hablé del pacto fiscal (a Rajoy) y no le pedí ni un euro, le dije 'Cataluña podría llegar a tener los mismos poderes legislativos que otras autonomías españolas en materia fiscal aunque eso no nos diera, de entrada, el dinero que tienen otros per cápita".

Ambos políticos estuvieron de acuerdo en que el origen del presente proceso soberanista y de la escalada independentista se halla en la sentencia del Tribunal Constitucional que recortó el Estatut refrendado por el pueblo catalán.

Felipe González fue especialmente contundente al valorar que le "molestan" dos aspectos de la sentencia: "Una literatura absolutamente innecesaria en la que se hacen juicios políticos de valor y no constitucionales", y un segundo aspecto, "que los pocos artículos suprimidos están vigentes en otros Estatutos".