El concejal delegado del Plan Integral del Casco Histórico, José Manuel Alonso (IU), ha defendido este martes la delimitación del nuevo PICH 2013-2020, para subrayar que el plan priorizará la acción social y el empleo con una dotación económica de 120 millones de euros.

En rueda de prensa acompañado por la responsable técnica del PICH, Ana Sanromán, José Manuel Alonso ha detallado que el nuevo plan fija cinco líneas de actuación básicas y, como novedad, se desarrollará en dos fases de cuatro y tres años, para revisar su ejecución.

El documento se presenta esta tarde en el Consejo Sectorial del PICH y, después, se tramitará en el Ayuntamiento como un expediente "ordinario", pasando por comisión y pleno, si no llega al de enero, se aprobará en la sesión de febrero, ha apuntado.

El concejal de IU ha explicado que en el diseño del nuevo PICH "era necesario hacer una propuesta de delimitación territorial" teniendo en cuenta "lo que ya se ha hecho con anterioridad" y analizando las necesidades actuales.

Así, ha recordado que Chunta Aragonesista (CHA) solicitó la inclusión de una parte del barrio Jesús que se ha asumido "porque es un territorio muy pequeño" y con problemas similares a las zonas que se ven beneficiadas por el plan integral.

En el caso del Casco Histórico, y una vez que ya se ha remodelado la plaza de los Sitios o el Paseo de la Independencia, se han tenido en cuenta las necesidades de la población en materia de acción social, ha señalado, para agregar que se contemplan otras zonas como el parque Bruil o el parque de San Pablo. Se excluirán del plan 2013-2020 la zona que va desde el Edificio Pignatelli y puerta del Carmen, hasta el paseo de la Independencia, plaza de Los Sitios o Constitución.

"no depende de la voluntad de un concejal"

José Manuel Alonso ha alegado que "la delimitación de un lugar de actuación de un plan integral no depende de la voluntad de un concejal", sino de unos criterios determinados en cuanto a exclusión de la población, vulnerabilidad o existencia de infraestructuras y solares abandonados.

De esta forma, para defender el nuevo territorio del PICH, ha aportado algunos datos sobre la población que reside en el Casco Histórico, en el barrio de San Pablo y en la zona centro y que han requerido la intervención de los centros sociales o que han solicitado ayudas de urgente necesidad, el Ingreso Aragonés de Inserción o sobre la presencia de población inmigrante.

Respecto al diseño del plan, José Manuel Alonso ha resaltado que lo ha elaborado un equipo "multidisciplinar" de la Universidad de Zaragoza, contando con la opinión de sesenta colectivos, y se han fijado cinco líneas principales dedicadas a la acción social y el empleo.

Cinco líneas

La primera línea es la participación, convivencia y cohesión social, en la que proponen crear un Consejo del Casco Histórico integrado por los presidentes de las Juntas de Distrito afectadas por el territorio del PICH; ampliar el proyecto de red de recursos compartidos Compartea; mantener la mediación comunitaria y los programas de intervención y garantizar los programas de comida a domicilio, becas de comedor; o poner en marcha el proyecto ViveMúsica en el Casco, entre otras iniciativas.

Los servicios públicos y equipamientos centran la segunda línea, con medidas de limpieza en calles, iluminación en algunas zonas, creación de un centro de mayores en la zona de viviendas de Aloy Salas, rehabilitación de la Imprenta Blasco, del interior del antiguo pabellón del Cuartel de San Agustín como centro para artistas y vecinos, o reconversión de los juzgados de la Plaza del Pilar para uso universitario.

En este punto, Alonso ha advertido de que el Casco Histórico presenta "zonas de sombra", debido al traslado de los Juzgados de la Plaza del Pilar, que han causado "un vacío importante" en la actividad de la zona. No obstante, "aparece en el horizonte la esperanza de la licitación de Pontoneros", ha manifestado, para lamentar también la decisión de suprimir la escuela taller de artes gráficas del Casco que "intentaremos recuperar".

En tercer lugar, se actuará en infraestructuras, escena urbana y patrimonio, con la eliminación del cableado eléctrico, la redacción y aprobación de una ordenanza municipal de protección de la escena urbana en el Casco Histórico, renovación de equipamientos y continuación del programa 'estonoesunsolar'.

También se reclama un plan de movilidad para la zona y el estudio de proyectos de peatonalización, como el planteado para la calle Don Jaime; así como analizar el impacto social, económico y comercial de la propuesta de estudio de la segunda línea del tranvía.

La cuarta línea se dedica a suelo y rehabilitación de vivienda y la quinta y última a acciones de comercio y turismo. En este campo, el PICH contempla el desarrollo de un plan de revitalización comercial en San Pablo y Las Armas, la dinamización de los comercios del Casco y la promoción de alternativas comerciales como la implantación de coworking, una bolsa de locales de alquiler o las cesiones a bajo coste.

En total son 120 millones de presupuesto para desarrollar el nuevo PICH, que igualan a la dotación económica del primer plan 1997-2004; mientras que entre 2005 y 2012 los fondos disponibles ascendieron a 195 millones, gracias a inversiones europeas y planes del Estado.