El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha asegurado este martes que "todo el mundo [en el PP] es partidario de cumplir el programa electoral y de modificar la ley del aborto". El ministro ha dicho haber hablado con "todos los que han hecho manifestaciones" sobre este asunto y ha afirmado que, "exceptuando alguna voz histórica, como la de Celia Villalobos", nadie de su partido ha manifestado un criterio contrario a la reforma. Villalobos ha llegado a pedir libertad de voto para cuando este asunto se debata en el Parlamento.

Tras apuntar que la vicepresidenta del Congreso ha expuesto su postura "desde la máxima lealtad", Gallardón ha insistido en que "el resto puede tener sus dudas, pero no hay nadie que haya dicho que esté a favor de la desprotección absoluta del concebido, que es lo que establece la ley de 201o". Así ha respondido durante una entrevista en Los Desayunos de TVE al ser preguntado por las declaraciones que han realizado sobre el proyecto algunos de sus compañeros, como el presidente de Extremadura, José Antonio Monago.

El jefe del Ejecutivo extremeño afirmó durante su discurso de fin de año que "nadie puede negar a nadie su derecho a ser madre, ni tampoco obligarle a nadie a serlo" y el miércoles pasado, el PP regional registró en el Parlamento autonómico una iniciativa en la que solicita al Gobierno que "no avance" en la modificación de la normativa mientras no se abra un proceso de diálogo y se logre un consenso.

Monago se sumaba así a otras voces discrepantes, como la de Juan Vicente Herrera, presidente de Castilla y León. Herrera ha abogado por esperar al pronunciamiento del Tribunal Constitucional sobre la ley aprobada por el PSOE en 2010.

Otros dirigentes populares, si bien son partidarios de reformar la normativa vigente, también han sido críticos con el proyecto presentado por el Ejecutivo. Es el caso de la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, quien ha afirmado estar más a favor de "una regulación de plazos que de supuestos" y ha reconocido no coincidir con la "opinión mayoritaria" de su partido.

Borja Sémper, presidente del PP de Guipúzcoa, cree que la nueva ley impedirá a las mujeres "decidir sobre su propio cuerpo" y Rosa Valdeón, alcaldesa de Zamora, anunció que elevaría al Ministerio de Justicia su disconformidad con el proyecto.

El titular de Justicia ha aprovechado la entrevista de este martes para acusar a la izquierda de "arrogancia intelectual" y de "creer que tiene el monopolio para legislar sobre los derechos y libertades".

"No quieren debatir sobre el aborto. Dicen que no estamos legitimados para legislar sobre esa materia. No le temamos al debate", ha agregado.

El ministro ha hecho estas declaraciones después de que el PP haya rechazado que tanto él como la ministra de Sanidad, Ana Mato, comparezcan en el Congreso para dar detalles sobre la reforma.

Acerca de la posibilidad de incluir en la nueva norma el supuesto por malformación del feto, el ministro parece haber flexibilizado su postura. Mientras llegó a señalar que la ley no sufriría modificaciones esenciales durante su tramitación en la Cámara, este martes, al ser preguntado sobre si incluirá finalmente el mencionado supuesto, Gallardón ha comentado que "todos los proyectos de ley sufren cambios en el trámite parlamentario".