La prensa venezolana se ha visto obligada a reducir el formato y el número de periódicos debido a la "falta de papel", según ha denunciado este viernes el diario La Nación, con una línea editorial abiertamente crítica al Gobierno de Nicolás Maduro. "A partir de La Nación circulará con varios cambios en su estructura, disminución de páginas y menos ejemplares, como una medida de emergencia para tratar de ahorrar el papel que queda, y así poder prolongarlo para poco más de un mes", ha anunciado en un comunicado.

La directora de La Nación, Omaira Labrador, ha pedido "comprensión" a lectores y anunciantes, indicando que, aunque "bajará el número de informaciones en la edición impresa, se contará con la página web para publicar la mayor cantidad de noticias posibles".

"Antes salíamos con tres cuerpos y 30 o 36 páginas, ahora vamos a circular con dos cuerpos, de ocho páginas cada uno, informaciones muy cortas y fotografías pequeñas", ha detallado. Labrador ha indicado que "habrá una simbiosis entre el papel y la web, porque lo más grave que puede suceder es que 'La Nación' no circule". "Sabemos que desde hace 45 años la gente está acostumbrada a desayunar con ella al lado, y eso va a seguir siendo así", ha dicho.

Labrador ha explicado que La Nación, "al igual que todos los periódicos de Venezuela", se ha visto "en la imperiosa necesidad" de adoptar estas medidas por la "crisis" de "falta de papel", que les ha llevado "al límite". La periodista ha aclarado que, aunque "la crisis comenzó en el mes de octubre, en los últimos días ha arreciado, pues se había anunciado que para los primeros días de enero comenzaría a llegar el papel, y aún no ha llegado".

"Por estas razones desde hace varios meses dejó de publicarse el suplemento infantil de los sábados Pirulín y no se imprimió en diciembre la edición aniversario, que este año es en homenaje a los 50 años de la Feria Internacional de San Sebastián", ha apuntado.

Asimismo, ha subrayado que La Nación no es importador de papel, es decir, no recibe dólares del Cadivi (sistema de entrega de divisas del Gobierno), razón por la cual debe comprar sus insumos a empresas distribuidoras, las cuales señalan que no hay papel".

Venezuela sufre desde hace meses una crisis de abastecimiento de productos básicos que se debe, en parte, a la escasez de divisas, que el Gobierno concede a través del Cadivi bajo estrictos requisitos. Actualmente, el país importa el 90% de las mercancías. En el caso del papel, los medios de comunicación venezolanos han denunciado que se trata de una estrategia del Gobierno para acallar a los opositores. El Ejecutivo, por su parte, les acusa de especular con las divisas que supuestamente piden para comprar papel.