Las claves de la sonda europea Rosetta en su persecución del cometa Churyumov-Gerasimenko

  • La sonda, que lleva 10 años en el espacio, despertó de su hibernación en enero y este miércoles alcanzará el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.
  • Éstas son, de la A a la Z, las claves de la misión Rosetta y de los cometas, esas 'estrellas de larga cabellera' que siempre han asombrado a la humanidad.
Recreación artística de la sonda Rosetta aproximándose al cometa Churyumov-Gerasimenko.
Recreación artística de la sonda Rosetta aproximándose al cometa Churyumov-Gerasimenko.
ESA
Recreación artística de la sonda Rosetta aproximándose al cometa Churyumov-Gerasimenko.

La heroica sonda espacial Rosetta había estado durmiendo la siesta hasta enero. Estuvo 30 meses en estado de hibernación más allá del cinturón de asteroides, cerca de la órbita de Júpiter. Un equipo de la Agencia Espacial Europea (ESA) activó su despertador interno aquel mes para que Rosetta volviese a la actividad. Este miércoles, siete meses después de su despertar y tras diez años de viaje espacial, llegará a su objetivo: el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.

Rosetta estudiará la evolución del cometa in situ, durante su viaje hacia el Sol. Los cometas, formados fundamentalmente por hielo y roca, son muy importantes desde el punto de vista científico porque su material ha permanecido inalterado desde hace 4.500 millones de años y por pueden aportar información interesante sobre los orígenes del Sistema Solar. Además, algunas teorías apuntan a que ellos aportaron buena parte del agua que hay en nuestro planeta e incluso que podrían haber traído la vida a La Tierra.

Éstas son, de la A a la Z, las claves de las estrellas de larga cabellera y de la misión Rosetta que busca descubrir sus secretos.

Augurios. El avistamiento de cometas frecuentemente ha sido interpretado como un augurio a lo largo de la historia. Su paso ha sido asociado a la muerte de reyes y emperadores, o como indicador de victorias o derrotas. Incluso en la actualidad hay grupos que les atribuyen poderes paranormales. En 1997, los miembros de una secta se suicidaron en masa al paso del cometa Hale-Bopp.

Belén. Algunos científicos creen que la estrella de Belén pudo haberse tratado en realidad de un cometa, aunque también existe la posibilidad de que hubiera sido una alineación planetaria o una supernova. A principios del siglo XIV, Giotto representó al cometa Halley como estrella de Belén en su obra La adoración de los reyes magos.

Cola. La cola de un cometa puede llegar a medir decenas de millones de kilómetros. Se forma por la sublimación del agua y otros materiales del cometa cuando éste se aproxima al sol y recibe su calor. En realidad no tienen una única cola, sino dos: una de gas y otra de polvo (ligeramente curva). Estas colas no se extienden en dirección contraria a la trayectoria del cometa (como ocurre, por ejemplo, con la estela dejada por un barco en el agua), sino que siempre apuntan hacia el lado contrario al sol, puesto que son empujadas por el viento solar.

Diez. Es el número años que Rosetta lleva viajando por el espacio. Fue lanzada el 2 de marzo de 2004 y a lo largo de su viaje ha pasado en varias ocasiones cerca de La Tierra y Marte, para ganar velocidad aprovechando el impulso gravitacional de los planetas. Está previsto que Rosetta alcance al cometa en agosto de este año, aunque el aterrizaje no se producirá hasta noviembre.

ESA. La Agencia Espacial Europea (ESA) es la responsable de la misión Rosetta, que si todo va bien hará historia porque nunca antes un artefacto se había posado sobre la superficie de un cometa, cuyo movimiento es más impredecible que la de un asteroide. La NASA ha realizado misiones de investigación de cometas, pero todas habían consistido hasta ahora en una breve aproximación a éste, nunca en un aterrizaje.

Facebook. Esta red social ha sido utilizada por la ESA para su campaña 'Wake up, Rosetta' ('Despierta, Rosetta'), en el que la Agencia Espacial Europea invita a los ciudadanos a grabar un vídeo para despertar a Rosetta. Los diez más votados se transmitirán en dirección a Rosetta y al espacio profundo.

Gerald Kuiper. Este astrónomo predijo a mediados del siglo XX la existencia del cinturón que lleva su nombre: un disco situado más allá de la órbita de Neptuno y formado por numerosos objetos, entre ellos cometas inactivos. De tanto en tanto, las influencias gravitatorias hacen que uno de estos cuerpos se vea impulsado hacia el interior del Sistema Solar, convirtiéndose en cometa cuando, al llegar a las proximidades del Sol, el hielo y otros compuestos de su núcleo se subliman y convierten en gas. El cinturón de Kuiper es uno de los dos grandes 'almacenes' de cometas del Sistema Solar.

Halley. Es, posiblemente, el cometa más famoso del mundo. El cometa Halley nos hace una visita cada 76 años. Su trayectoria fue calculada en 1682 por el astrónomo inglés Edmund Halley: fue la primera vez en la historia que se calculó la órbita de un cometa. El Halley es un cometa de periodo corto (así se denomina a los que tardan menos de 200 años en dar la vuelta completa) y procede del cinturón de Kuiper. Los cometas de periodo largo proceden de la Nube de Oort y sus periodos orbitales pueden llegar a ser de millones de años.

Ison. Iba a ser el 'cometa del siglo', uno de los más brillantes jamás vistos por el hombre... hasta que a finales de noviembre de 2013, durante su máxima aproximación al Sol, quedó destruido, dejando con la miel en los labios a millones de aficionados a la astronomía.

Júpiter. El mayor planeta del Sistema Solar ejerce como 'guardaespaldas' de La Tierra. Su enorme masa atrae a muchos cometas y asteroides, lo que impide que éstos impacten contra otros planetas vecinos... como el nuestro. En 1994 los astrónomos pudieron ser testigos de la primera observación en vivo y en directo de un choque entre dos cuerpos del Sistema Solar: un cometa, el Shoemaker-Levy, se estrelló contra el gigante gasesoso.

Kilómetros. El cometa Churyumov-Gerasimenko, objetivo de la misión, mide 5 kilómetros en su lado más ancho. Es un cometa pequeño en comparación de otros como el Halley (15 km de largo), o el Hale-Bopp de 1997 (40 kilómetros de diámetro).

Lutecia. Como cualquier hijo de vecino que aprovecha un viaje de trabajo para hacer algo de turismo, en el largo viaje de diez años hacia su destino Rosetta está recabando información sobre otros objetos del Sistema Solar. En 2010, a su paso por el cinturón de asteroides, voló cerca de algunos de ellos. El más grande fue Lutecia, un asteroide con forma de patata, lleno de cráteres y que mide 130 kilómetros en su lado más ancho. La sonda aventurera pasó a unoss 3.162 km de distancia del asteroide y sacó fotos de su superficie que envió a La Tierra.

Máscaras antigás. En mayo de 1910, la trayectoria de La Tierra pasó a través de la cola del cometa Halley, algo que causó escenas de pánico, ya que entre los compuestos de su cola hay cianógeno, un derivado del cianuro que puede resultar mortal para el ser humano. A pesar de que los científicos advirtieron de que las sustancias venenosas se disiparían en la atmósfera sin causar ningún problema, el miedo entre la población fue tal que surgió un negocio de escasa duración pero muy lucrativo: la venta de máscaras antigás.

Núcleo. Cuando un cometa se activa por el calor del Sol, el hielo y el resto de los compuestos que lo forman comienzan a convertirse en gas. A pesar de que un cometa tiene una gravedad muy débil, ésta es suficiente para atrapar a su alrededor buena parte de este gas, que envuelve el núcleo rocoso como una atmósfera (que recibe el nombre de 'coma') cuyo tamaño llega a alcanzar el tamaño de un planeta. Rosetta y su módulo de aterrizaje, Philae, podrán transmitir de primera mano imágenes sobre cómo se produce este proceso: Philae desde la superficie del núcleo y Rosetta desde su órbita, ya que acompañará al Churyumov-Gerasimenko y a su pasajero a lo largo de todo su viaje alrededor del Sol.

Oort. El astrónomo holandés Jan Oort propugnó en 1950 la existencia de una gigantesca nube esférica formada por innumerables rocas heladas que envuelve al Sistema Solar. Esta Nube de Oort es, junto al cinturón de Kuiper, un gigantesco depósito de aspirantes a cometas.

Philae. Es el pequeño módulo de aterrizaje que viaja con Rosetta. Como la gravedad de un cometa de cuatro kilómetros de diámetro es prácticamente despreciable, Philae se sujetará a la superficie con tornillos y arpones al aterrizar para no rebotar contra la superficie y perderse en el espacio. Su misión: hacer fotos de la superficie de muy alta resolución y estudiar la composición del hielo y de la materia orgánica que componen el núcleo del cometa. Philae está equipado con un laboratorio e instrumental que le permitirá tomar muestras hasta a 30 centímetros de profundidad.

Química. Además de roca y hielo, los cometas contienen también pequeñas cantidades de elementos químicos volátiles como metano, amoniaco y dióxido de carbono. La presencia en los cometas de elementos orgánicos (basados en el carbono) es uno de los factores en los que se apoya la teoría de la panspermia, según la cual la vida en nuestro planeta pudo haberse originado en el espacio y llegar aquí a bordo de un cometa. Según esta teoría, sería probable que la vida hubiera prosperado también en otros planetas y lunas del sistema solar, puesto que todos ellos han sido bombardeados durante miles de millones de años por cometas que podrían ser precursores de la vida.

Rosetta. La sonda debe su nombre a la piedra Rosetta, que fue encontrada en Egipto en 1799. La piedra data de dos siglos antes del nacimiento de Cristo y en ella aparece el mismo texto escrito en varios idiomas, lo que fue clave para descifrar el significado de la escritura jeroglífica. Del mismo modo, la misión de la sonda espacial Rosetta podría ser clave para obtener más información sobre los orígenes del Sistema Solar.

Steins. Uno de los dos asteroides fotografiados por Rosetta a su paso por el cinturón de asteroides es éste cuya forma recuerda vagamente a la de un diamante: el Steins, de apenas 5 km de diámetro. El encuentro tuvo lugar en 2008, y Rosetta llegó a situarse a sólo 800 kilómetros de distancia de él.

Tapiz. El impacto que siempre han causado en la población los cometas cuando son visibles desde La Tierra queda reflejado en obras artísticas como el Tapiz de Bayeux, que fue bordado en el siglo XI y narra los hechos previos a la conquista de Inglaterra por parte de los normandos. En una de las escenas de la narración aparece el cometa Halley, que pasó poco después de que hubieran comenzado a bordar el tapiz.

Uvas. ¿Qué tienen que ver las uvas con los cometas, se preguntarán ustedes? Probablemente nada, pero en el siglo XIX se pensaba que ambos factores estaban relacionados y que el paso de un cometa podía ser muy beneficioso para las propiedades de los viñedos. A la cosecha de 1811, que fue de una calidad excepcional y coincidió con el paso de un cometa, se la conoció como la "Añada del Cometa".

Viento solar. El viento solar está formado por partículas cargadas eléctricamente que son emitidas por el sol. Esta corriente de plasma es lo que empuja los gases del cometa y, por ello,  el viento solar es la causa de que los cometas tengan cola.

Wirtanen. El cometa Wirtanen fue el primer objetivo de la sonda Rosetta. Sin embargo, un fallo detectado en los cohetes que iban a lanzar la sonda obligó a posponer este lanzamiento (previsto para finales de 2003). El retraso situó al Wirtanen fuera de tiro, por lo que la ESA seleccionó otro objetivo para la misión: el Churyumov-Gerasimenko es un segundo plato.

X/1106C1. Este cometa, también conocido como el Gran Cometa de 1106, fue tan brillante que era visible incluso a plena luz del día, según varios registros de la época de distintas partes del mundo.

Youtube. Dentro de su labor de divulgación, la Agencia Espacial Europea ha distribuido a través de Youtube vídeos sobre esta misión, desde una preciosa historia de animación para niños y mayores hasta una explicación sobre cómo será, paso a paso, el despertar de la sonda.

Zona. La zona del cometa Churyumov-Gerasimenko en la que aterrizará Philae será el hemisferio sur. Los científicos dreen que esta opción será más segura, ya que en el momento del contacto está previsto que ya habrán comenzado a escapar gas en su cara norte.

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