El controvertido actor Gerard Depardieu, actualmente de nacionalidad rusa, ha protagonizado un nuevo incidente que viene a sumarse a su larga lista de escándalos y problemas con la justicia.

En esta ocasión, protagonizó una trifulca en un restaurante al sur de Italia, por la que podría enfrentarse a un arresto y una multa, según ha publicado este jueves la publicación The Hollywood Reporter.

El intérprete, de 65 años, nominado al Oscar en 1990 por la película Cyrano de Bergerac, ha regresado a París, ciudad que abandonó tras una polémica con el presidente francés Francois Hollande en 2012, para participar en una obra de teatro.

En uno de sus días de descanso, el actor viajó a la localidad de Lecce, al sur de Italia, donde cuenta con una casa. Depardieu se quejó al dueño de un restaurante que hacía demasiado ruido, trató de intimidarlo y finalmente roció al propietario del local y los comensales con agua durante varios minutos.

La policía advirtió al actor que se enfrentaría a un arrestro y una multa si volvía a enfrentarse al dueño del restaurante otra vez.

El actor ha eludido reiteradamente la justicia de su país, con quien tiene causas pendientes por varios accidentes de tráfico estando ebrio, también cambió de nacionalidad para pagar menos impuestos y fue denunciado por orinar en el pasillo de un avión, entre otros escándalos.