La debacle turística de Madrid no se detiene. Incluso, la comunidad sigue acumulando nuevos datos negativos. El último indicador, conocido este jueves, refleja una caída en el gasto total de los turistas extranjeros en Madrid: entre enero y noviembre de 2013, los visitantes llegados a la región se gastaron 4.560 millones de euros, un 1,2% menos que en mismo periodo de 2012, según la Encuesta de Gasto Turístico realizada por el organismo oficial Turespaña. Estos datos negativos contrastan con las buenas cifras del resto de España, donde crecen tanto el número de visitantes como el volumen de gasto. De hecho, entre las autonomías tradicionalmente turísticas, Madrid es la única que pierde viajeros e ingresos en el acumulado anual.

Los expertos del sector se muestran críticos con la falta de promoción en el exterior por parte de la Comunidad y el Ayuntamiento de la capital. "Si se comparan los datos de Madrid con los del resto de comunidades, se ve claramente que este es un problema concreto de Madrid. Se puede achacar a cuestiones coyunturales como la crisis de Barajas, pero el verdadero defecto es que Madrid no funciona como destino turístico internacional: no estamos entre los destinos que más se desea conocer porque no se ha sabido transmitir la gran cantidad de cosas interesantes que se pueden hacer en Madrid", lamenta Antonio Gil, presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (Aehm).

La caída del gasto está directamente relacionada con la disminución de la entrada de extranjeros, reflejada en otra encuesta (también de Turespaña) publicada a principios de esta semana. Durante los primeros once meses de este año, visitaron Madrid 3,91 millones de turistas internacionales, es decir, un 6,9% menos que en el mismo periodo del año anterior. "Es un descenso continuado y vertiginoso que no tiene freno desde octubre de 2012", recuerda Gil. Según los analistas de Turespaña, en ese tiempo han disminuido "casi todos los mercados emisores (Italia, Francia, Estados Unidos, Alemania, Portugal,...)". Únicamente aumentan los turistas de América Latina y de mercados emergentes, como Rusia o China.

Pese al descenso en el gasto total, las estadísticas oficiales reflejan que el gasto medio por turista en Madrid es de los más elevados de España: cada visitante se deja 167 euros al día en sus viajes a la región, a mucha distancia de los 121 euros diarios que se dejan en Cataluña. A priori este dato es positivo, ya que los pocos turistas que vienen consumen mucho en Madrid. Sin embargo, los empresarios del sector creen que este es un arma de doble filo.

"Se han centrado en atraer al turismo de alto nivel, que viene a hacer compras y se aloja en hoteles de cinco estrellas. Es un turismo muy bueno y hay que mantenerlo. Pero habría que esforzarse en aumentar el volumen de viajeros, atrayendo a turistas de menor nivel y recuperar los mercados tradicionales de Europa", reivindica José Luis Méndez, vicepresidente de la Unión Empresarial de Agencias de Viajes (UNAV). "Están despuntando los turistas de mayor poder adquisitivo, de Rusia y Japón, pero hace falta que venga una mayor cantidad. El problema es que están fallando los europeos y estadounidenses, que eran de los que nos nutríamos", añade el presidente de los hoteleros.

Las elevadas tasas aeroportuarias en Barajas tampoco ayudan a captar visitantes extranjeros, según los empresarios turísticos. "El aeropuerto es el enlace de Madrid con el mundo, por lo que es clave que bajen las tasas aeroportuarias. Así se podrían establecer las compañías aéreas de bajo coste, que son las que traen visitantes de forma masiva. Con los precios que hay ahora, los europeos se decantan por otros destinos urbanos donde volar es más barato, como Barcelona, París, Ámsterdam, Bruselas o Roma", explica Méndez.

Tras conocer los nuevos datos, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado su intención de presentar un nuevo plan de turismo "a primeros de año". Su intención es captar nuevos turistas e intensificar la promoción de la ciudad como destino internacional, aunque no ha dado detalles concretos sobre las medidas para conseguirlo. Además, la alcaldesa confía en que los datos de diciembre contribuyan a salvar el balance del año, al menos en la llegada de turistas nacionales, ya que en esas estadísticas se incluirán las visitas realizadas durante el Puente de la Constitución y en la campaña navideña.