El Ayuntamiento de Palma impulsa una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbanística para adaptar el crecimiento residencial de la ciudad al Plan Territorial de Mallorca.

Así lo ha anunciado el teniente de alcalde de Urbanismo y Vivienda, Jesús Valls, quien ha explicado que "se trata de un impulso de una modificación puntual para la adaptación del Plan General a los límites del Plan Territorial en relación a las hectáreas de crecimiento residencial, eliminando el uso turístico del uso terciario en nueve polígonos industriales".

De esta manera y de aprobarse esta modificación, no se podrá dar un uso turístico en suelos de los polígonos industriales de Son Rossinyol, Son Pardo, Son Morro, Son Oms, Son Ximelis, Can Fontet, Ca's Pastors, Son Castelló Sur y Ses Calafates. El resto de usos permitidos en el sector terciario y que sí se les podrá dar a estos polígonos son el institucional, administrativo, comercial e industrial.

El responsable de Urbanismo ha explicado que en 1998, el Plan General preveía 430 hectáreas de crecimiento residencial. Posteriormente, se permitió un aumento de hasta un 10 por ciento de crecimiento, lo que permitió poder desarrollar 470 hectáreas de crecimiento residencial en Palma.

Más tarde, en el año 2004, el Plan Territorial redujo el crecimiento residencial en Palma a 322 hectáreas, dejándolo en el 6,8 por ciento. En el año 2011, el Plan Territorial sufrió una segunda modificación, con lo que se limitó el crecimiento de Palma a 211 hectáreas, lo que supone un 5,01 por ciento respecto a las DOT.

Según ha señalado, actualmente el PGOU supera el límite de crecimiento fijado por el Plan Territorial para el crecimiento no vinculado en 75,4 hectáreas y, "una vez aprobada esta modificación y con el nuevo cómputo establecido, el PGOU se queda con un remanente de 11,14 hectáreas para nuevo crecimiento".

Valls ha aclarado que han recibido el informe preceptivo y vinculante de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) y ha sido remitido a la Comisión Balear de Medio Ambiente para realizar la tramitación ambiental previa y, así, poder llevar a cabo esta modificación puntual. El teniente de alcalde ha dicho que este cambio "elimina hectáreas de crecimiento residencial y lo hacemos sin necesidad de desclasificar ningún suelo urbanizable previsto en el Plan General del 98".

Valls ha matizado que la intención es "modificar y simplificar" la normativa para dinamizar la economía y poder generar puestos de empleo "sabiendo que el sector de la construcción es el más castigado por la crisis que hemos estado viviendo y entendemos que esta adaptación va a permitir que ese 5,01 por ciento de hectáreas de crecimiento que sí se pueden llevar a término no estén estancadas si se les puede dar trámite".

Los suelos urbanizables que están en disponibilidad de construir y que mediante esta modificación se podrán desarrollar están ubicados en: Génova (10,3 hectáreas), Son Puig d'Orfila Sur (23,53 hectáreas), Son Sardina (8,83 hectáreas), Sa Bomba (9,12 hectáreas) y Son Güells (42,31 hectáreas).

"De esa manera hemos conseguido sin recalificar ni desclasificar ningún sector, hacer una adaptación en lo que hace referencia al parámetro de hectáreas de crecimiento al Plan Territorial", ha señalado

Licencias por 161.000 EUROS

Por otro lado, el teniente de alcalde de Urbanismo y Vivienda ha anunciado que el Consejo de Gerencia de Urbanismo ha otorgado licencias por valor de más de 161.000 euros para inversiones previstas de 1,2 millones de euros.

Valls ha destacado la licencia concedida al Hotel Niágara de la Playa de Palma, que realizará una modificación de siete habitaciones individuales y reformará los ventanales de la fachada.

Además, el Hotel Augusta, en la calle Corb Marí de la Bonanova, aumentará en ocupación, no en altura, en base a la Ley de Turismo 8/2012. Finalmente, el Hotel Augusta aumentará en 21 habitaciones y pasará de ofrecer 81 unidades con capacidad de 162 plazas hoteleras en total.