El careo entre el doctor Eduardo Vela, imputado por uno de los 'casos de niños robados', y la madre adoptiva de una de las denunciantes ha concluido este martes sin que la jueza haya aclarado las dudas sobre las contradicciones en la investigación, han informado fuentes jurídicas.

La juez María Isabel Garaizabal, al frente del Juzgado de Instrucción número 46 de Madrid, ha celebrado esta mañana un cara a cara entre el ginecólogo e Inés Pérez, de 90 años y madre adoptiva de Inés Madrigal.

Ésta nació el 4 de junio de 1969 en la Clínica San Ramón. Madrigal fue dada en adopción a una mujer esteril, que fingió un parto a instancias del doctor Vela. La madre aceptó ser denunciada para conocer la verdad.

Su hija quiere, según ha señalado, que, si Vela sostiene que siempre siguió la ley, que reconozca que la entregó a su madre como un regalo cuando por lo general en otros casos las madres pagaban por la entrega de un bebé.

El pasado junio, Vela declaró sobre este caso y se desvinculó del supuesto robo de la niña. En la causa se le acusa de detención ilegal y de falsedad documental.

Al igual que hizo entonces, Vela se ha mantenido en su postura y se ha limitado a reconocer ante la magistrada su firma en los documentos entregados a Inés tras un presunto parto fingido.

Al concluir el careo, Pérez ha manifestado a los medios concentrados a las puertas de los juzgados que el médico lo ha negado "todo". Su abogado, Alberto Martín, ha insistido a los medios que no se podían desvelar datos de lo manifestado, dado que la jueza ha pedido que se respete la confidencialidad de lo sucedido para mantener el secreto del sumario.

A su salida, la madre de la denunciante ha sido aplaudida por otras madres afectadas por esta supuesta trama de bebés robados. La presidenta de S.O.S. Bebés robados, Mª Cruz Rodríguez, le ha entregado un ramo como muestra del apoyo de su asociación a su acción al permitir que su hija la denunciara para conocer la verdad. Bajo los aplausos de los congregados, Inés Pérez ha animado a otras madres adoptivas a contar la verdad.

Por su parte, el abogado Guillermo Peña, que representa a la asociación, ha destacado que la investigación ha quedado como al principio. Y ha agregado que se practicarán nuevas diligencias para arrojar luz a lo sucedido.

Según Madrigal, Inés Pérez era estéril, y Vela le dio instrucciones de lo que debía hacer con el bebé. Para empezar debían rodearle de botellas de agua caliente y si se presentaba algún problema, no debía avisar a ningún otro médico, que no fuera él.