Xunta y Fenosa aceptan demorar cinco años la devolución del crédito de 25,7 millones, fijada inicialmente para 2017 y 2018

Un mínimo del 43% del transporte se realizará por ferrocarril en los próximos 10 años, lo que permitirá ahorrar un 8% del coste anual

El presidente de Sogama, Luis Lamas, cree que en 2014 la planta de Cerceda "difícilmente" tendría un resultado antes de impuestos "superior al millón y medio de euros" si se aplazase a julio la subida del canon —si bien lo acordado hasta el momento es que su aplicación comience en marzo— que cobra a los ayuntamientos por la recogida y el tratamiento de la basura.

Además, estima que en los próximos meses, mediante el cobro de unos 7 millones procedentes del plan de proveedores y otros 4 del Ayuntamiento de Pontevedra, la deuda descenderá por debajo de 5 millones —actualmente se sitúa en 17—.

En una entrevista concedida a Europa Press, Lamas desgrana las principales líneas del plan de viabilidad que elaboró la auditora PricewaterhouseCoopers ante la previsión de que este ejercicio la sociedad pública cierre con pérdidas.

En 2011, Sogama obtuvo 5,39 millones antes de impuestos —4,4 después— y en 2012 estas cifras estuvieron en 5,46 y 4,2 millones, respectivamente. Antes, en 2009, fueron de 1,64 y 1,1 millones, mientras en 2010 cayeron a -8,27 antes y -7,9 después de impuestos.

Ahora, tras la supresión de las primas y ante la reforma pendiente por el Gobierno del marco tarifario del mercado energético, pero también debido al malestar de los municipios, Sogama ya trabaja con PwC en la revisión del documento, que fue aprobado por el consejo de administración y entregado a Facenda, como obliga la ley, con una previsión de ganancias de unos 6,6 millones.

De la reforma energética, Lamas espera de Industria "cierta sensibilidad con las plantas de residuos", porque prestan un servicio público, aunque asume que hay un "cambio de filosofía" y que "a partir de hoy, difícilmente la venta de energía eléctrica va a abaratar sustancialmente el tratamiento de los residuos".

Conflicto con los ayuntamientos

La corrección del plan de viabilidad se inscribe en ese ambiente de conflicto con los consistorios, motivado por la subida en un 33,5% del canon. La Xunta introdujo esta medida a través de los presupuestos de la Comunidad Autónoma para el año que viene y su impacto —de repercutirse a la factura de cada hogar— se cifra en un euro mensual.

Ante la oposición de los alcaldes, Medio Ambiente y la Fegamp llegaron a un principio de acuerdo para demorar hasta julio su aplicación, pero la falta de consenso parlamentario se saldó con la aprobación de una enmienda presentada por el PP previamente y que únicamente pospone dicho incremento a marzo. La aprobación definitiva de las cuentas autonómicas está prevista en los próximos días.

Lamas señala que, por cada mes de aumento del canon, la sociedad ingresará 1,1 millones más, de modo que el tope de aplazamiento lo fija en seis meses, porque "con un mes más", la empresa "estaría en pérdidas de salida", algo que no es posible legalmente.

Al respecto de la revisión "al alza o a la baja" del canon, que se efectuará una vez se conozca la política retributiva estatal, cree que existe "margen".

En cuanto al anuncio de otro regidor, el nacionalista de Rianxo acerca de su salida de Sogama para irse a la planta de O Barbanza, descarta que sea el anticipo de una serie de abandonos, aunque afirma que si las corporaciones locales "entienden que alguna de las dos plantas existentes —Lousame y Nostián— o alguna otra que puedan poner en marcha les ofrece mejores condiciones, lo razonable es que lo usen". "Sogama, desde luego, seguiría funcionando", subraya.

Pacto para ampliar la planta

El presidente de la sociedad rechaza "la lectura" de que el aplazamiento responde a un cálculo electoral, pues "cuanto más se acerque 2015 —año de comicios municipales—, se supone que a los ayuntamientos más les perjudica". De hecho, reclama que la gestión de residuos esté "alejada del debate político" y cita casos contradictorios de las distintas fuerzas, incluido el PP, en función de la coyuntura de cada región.

Sin embargo, lamenta que la oposición está "disparando a todo" por lucha partidista. "Se ha dicho que era la reforma eléctrica y por tanto se disparaba a Madrid. Pero, claro, dijeron: 'se me escapan vivos estos de la Xunta y de Sogama'; con lo cual vamos a decir a la vez que es un problema de gestión. A ver, mire: una, o la otra", reprocha.

Así, defiende la necesidad de afrontar los requisitos del plan de viabilidad y subraya que, para Galicia, "sería un éxito y muy positivo" que la mesa de trabajo entre Medio Ambiente y Fegamp para avanzar en la modificación del plan de residuos tome una decisión en el primer trimestre o semestre de 2014 sobre "el qué debería hacerse" con las 200.000 toneladas que Sogama es incapaz de procesar y con las que "algo hay que hacer". "Con el PSOE yo creo que hay posibilidades si se quiere, porque la cercanía de planteamiento es importante", opina.

"Posiblemente la solución pase por incrementar la capacidad de tratamiento de la planta pero no la de incineración", avanza el dirigente, que avala que se desechase la idea de crear una 'Sogama del sur' por el coste de construir una infraestructura nueva, al ver "razonable" que se aprovechen sinergias en Cerceda y argumentando que el gasto en transporte —cifrado en 21 euros por tonelada— no se eliminaría y solo se reduciría unos euros.

Transporte y créditos

Precisamente para el nuevo concurso del transporte de los residuos, cuyo contrato actual —por una década— expira a finales de 2013, el plan de viabilidad de Sogama incorpora una novedad destacable: "Vamos a poner un mínimo muy elevado por ferrocarril, del 43% —está en un 25—, porque medioambientalmente es mucho mejor y económicamente va a suponer un ahorro de entre el 8 y el 10%, sobre un coste anual de 14 millones", adelanta Lamas.

Otra de las cuestiones clave que propone el plan redactado por Price es "demorar la devolución en cinco años" de los 25,7 millones correspondientes a los créditos concedidos por la Administración autonómica y Gas Natural-Unión Fenosa —de 13,1 y 12,6 millones, respectivamente—.

"Se les pide un esfuerzo", constata Lamas, y reconoce que si se obligase a la sociedad pública "a cumplir lo que está firmado —reintegrar los préstamos en 2017 y 2018— habría que subir un 4% más —el canon a los ayuntamientos— solo para generar caja".

VIDRIO, METALES,

Reciclaje e incineración

De forma paralela al plan de viabilidad, Sogama implementa un plan de acción con actuaciones como la recuperación de 15.000 toneladas anuales de vidrio, un tope de 30.000, que llegan a Cerceda y que "hasta la fecha iban a vertedero".

El mismo destino esperaban "desde 2002 hasta hoy" a entre 700 y 1.000 toneladas mensuales de metales férricos 'de rechazo'. Lamas reivindica, al respecto, el ingreso de 75 euros por cada tonelada que posibilita el vender estos materiales.

Un total de 21.000 toneladas al año son procesadas en Cerceda en la planta de envases, que ha mejorado este último año un 12% su eficiencia, por lo que se ubica en un 81%, por encima de la media estatal (80%). "Tenía que haber muchas más", admite el lucense. No obstante, remite a la separación en las viviendas para alcanzar este propósito.

La valorización energética atañe a 554.000 toneladas. "Parece que Sogama es la única que lo hace en todo el mundo, pero en Europa la incineración está a pie de calle", recrimina, antes de subrayar que no entiende "por qué en otros países se puede hacer y todo el mundo dice que tienen una conciencia ecológica altísima y resulta que aquí no está bien".