Un mismo juguete, según el establecimiento de compra, puede resultar hasta un 19 por ciento más caro, según ha podido comprobar la Asociación de Consumidores de Navarra Irache en un estudio sobre la oferta de este sector dirigida a las compras navideñas.

Según este estudio de la asociación, las diferencias de precio pueden ser de hasta el 19 por ciento en algunos productos, si bien lo más habitual es que las diferencias oscilen entre uno y cinco euros, lo que supone una variación en la mayor parte de los casos en torno al 10 por ciento.

Comparando los datos con los del pasado año, Irache ha observado diferencias del precio para un mismo juguete de hasta siete euros. Asimismo, ha detectado importantes diferencias entre juguetes similares pero de marcas conocidas y, especialmente, de aquéllos que hacen referencia a dibujos animados o películas populares.

Por otro lado, la asociación ha constatado que la mayor parte de los catálogos de juguetes informan sobre la edad para la que están diseñados, pero en alguno de ellos no consta esta información, "tan importante a la hora de que los juguetes seleccionados sean adecuados para el niño".

En este sentido, Irache ha podido comprobar diferencias llamativas, ya que el mismo juguete está indicado para tres años en un comercio y para seis en otro. Ante la duda, lo más recomendable es pedir asesoramiento al responsable del establecimiento.

Además, la asociación recomienda asegurarse de los accesorios que incluye el juguete y el tamaño, ya que "hay catálogos que son muy rigurosos e indican claramente todos los aspectos del producto y especifican el tamaño del juguete, el color, los accesorios con los que cuenta o si lleva pilas incorporadas, pero otros no".

Según ha expuesto Irache, "es muy importante valorar no sólo el precio, sino también las prestaciones que ofrece cada producto de entretenimiento", puesto que "en algunos casos un mismo juguete incluye pilas y en el otro no está especificado, u ofrece también una mascota incluida y en el otro no".

También es muy importante tener en cuenta el tamaño, "que en ocasiones no se puede apreciar en el catálogo y es un valor importante a la hora de calibrar el precio".

Promociones sujetas a ventas sin control externo

Por otra parte, Irache advierte de promociones sujetas a ventas sin control externo en la que se ofrecen accesorios o regalos añadidos al juguete a las primeras 1.000 o 1.500 unidades vendidas o simplemente hasta fin de existencias.

El problema de estas promociones, ha subrayado, es que el consumidor "no tiene forma de comprobar las ventas, por lo que el vendedor siempre puede decir que la promoción se ha agotado y denegar la oferta". Para evitar esto, es necesario preguntar si la oferta sigue siendo válida antes de comprar.

Además, hay colecciones de juguetes que ofrecen descuentos de hasta el 50 por ciento por la segunda unidad. Sin embargo, ha remarcado Irache, hay que leer la letra pequeña para darse cuenta de que éste descuento se aplicará sólo en el juguete de menor precio ya que, en ocasiones, "el consumidor hace el cálculo de gasto haciendo el descuento en el juguete más caro, por lo que el dispendio es mayor al que había calculado".

También recomienda la asociación tener cuidado con las devoluciones de dinero, ya que "algún establecimiento anuncia en su catálogo en letra mayúscula 'Te devolvemos el importe de tus compras' a partir de 100 euros, mientras que en la letra pequeña se comprueba que el vale de descuento corresponde al 10 por ciento de lo gastado".

Asimismo, ha señalado Irache, es importante fijarse en la validez del catálogo, que suele venir indicado en las primeras páginas, ya que las ofertas sólo son vinculantes durante este periodo, así como ver el juguete en el establecimiento y no comprarlo habiéndolo elegido exclusivamente por el catálogo.