Agentes de la Guardia Civil han detenido en Arjonilla (Jaén) a un hombre de 69 años como presunto autor de un delito contra la flora y fauna silvestre cometido al haber supuestamente dado muerte a 46 aves insectívoras pese a ser especies protegidas y no estar permitida su caza.

En una nota, la Benemérita ha explicado este miércoles que el arresto se produjo este martes alrededor de las 17,00 horas después de que agentes del Puesto de Arjonilla interceptasen el vehículo en el que viajaba este hombre con "46 aves muertas, 72 trampas de alambre acerado, conocidas como 'costillas', una azada y un recipiente con hormigas con alas".

Como consecuencia de estos hechos, el Instituto Armado ha denunciado ante la Delegación territorial de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía por una supuesta infracción en materia de caza a este hombre, a quien, con anterioridad a su detención, los agentes habían observado en una zona conocida como 'Arroyo Erije' de Arjonilla "recogiendo trampas" con "pájaros atrapados" en algunas de ellas.

Según recuerda la Guardia Civil, "las aves insectívoras están protegidas y no se permite su captura y muerte, dado que no se consideran piezas de caza, salvo las autorizaciones concedidas por la Delegación de Medio Ambiente para la captura por personal federado como 'silvestrista' cumpliendo las estrictas condiciones establecidas, y que solo autorizan la captura de tres especies de aves, con fines de canto, pero no de muerte", entre las que "no se incluyen" las capturadas por el detenido.

Este tipo de hechos puede ser penado con multa de hasta doce meses e inhabilitación especial para la caza por tiempo de dos a cinco años, y pueden acarrear "otras importantes consecuencias de orden administrativo", según la Benemérita.