Los tres principales sindicatos agrarios de Asturias, UCA, COAG y Asaja, pretenden que el futuro reparto de las ayudas de la Política Agraria Común tengan en cuenta aspectos como la superficie explotada, el número de cabezas de ganado, así como la renta agraria de cada posible beneficiario. Además, piden que se deje bien clara la figura del agricultor activo, como receptor de las subvenciones.

En una rueda de prensa, los secretarios generales de los tres sindicatos, Joaquín López (UCA), Mercedes Cruzado (COAG) y Geli González (Asaja), han dado a conocer un documento presentado en el registro de la Junta General del Principado. El objetivo es concienciar a los grupos políticos sobre estos aspectos, de cara a la negociación del reparto en España, que habría de estar concluida en enero del próximo año. Actualmente, en Asturias hay unos 11.000 ganaderos receptores de ayudas europeas.

Cruzado ha reivindicado que se considere el porcentaje de renta agraria, es decir, los ingresos por la actividad agraria, para fijar bien claramente lo que debe ser considerado un "ganadero activo", con derecho a las ayudas. Asimismo, pide "que sea una cantidad lo suficientemente justa para entender que quien recibe la ayuda sea una agricultor real".

Así, también demanda que se tengan en cuenta la superficie real y el número de cabezas de ganado, para que por ejemplo, no se considere ganadero a un señor que tenga "mil metros cuadrados de terreno y tres o cuatro ovejas", ha advertido González.

En el asunto de la superficie ha hecho especial hincapié el representante de UCA, en referencia a la necesidad de recuperar los pastos comunales, tomados por el matorral. Según ha explicado, son tan importante para el mantenimiento del ganado y del ecosistema, como para optar a las ayudas europeas.

Cruzado ha explicado que estas subvenciones son básicas para el sector, que actualmente con sus ingresos "no cubre gastos". Por ello, son claves, "tanto para la ganadería de leche como de carne".

El documento, consensuado por las tres fuerzas sindicales, se fijan cuestiones como definir la actividad en ganadería, las ayudas acopladas para el sector lácteo, o políticas de apoyo a la gandería extensiva.