El Pleno de Cantabria ha aprobado, con el voto a favor del PP, la reforma del Plan de Ordenación del Litoral (POL) para permitir la construcción de vivienda unifamiliar en suelo rústico en los municipios costeros y equipararlos con los del interior.

Una modificación que, según el Gobierno, propone un modelo de crecimiento más "moderado" y con un menor impacto ambiental, y que para la oposición es una "temeridad" y una "equivocación" con la que se "abre la mano" respecto a la actual protección de litoral.

Esta reforma, contra la que han votado PRC y PSOE, abre a los municipios del litoral la construcción de este tipo de vivienda que ya se permitía en los del interior tras la reforma de la Ley del Suelo en 2012.

La oposición ha advertido de que, con esta reforma, quienes construyan viviendas unifamiliares en suelo rústico al amparo de esta modificación pueden encontrarse con "recursos", "pleitos" y "sentencias de derribo" al no contar, a su juicio, con evaluación ambiental; sin embrago, el consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Urbanismo, Javier Fernández, lo ha negado y les ha acusado de transmitir un mensaje "apocalíptico" ante el que ha llamado a la "tranquilidad".

De hecho, ha instado a PRC y PSOE a que si lo desean recurran este modificación, algo que, según ha explicado, sólo podrá hacerse ante el Tribunal Constitucional, si bien les ha advertido de que el "fondo" es "similar" al presentado contra la construcción del Centro Botín, que ha sido "bendecida" por el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria.

Fernández ha acusado a la oposición de incurrir en "mentira tras mentira" y "engaño tras engaño" sobre el contenido y el alcance de la reforma, intentando "distorsionarla" presentándola como promotora de un "desarrollismo urbanístico desproporcionado", cuando, según ha dicho, no es así.

El consejero ha defendido que lo que se pretende es corregir un POL "desfasado" respecto a la Ley de Suelo, lo que no supone el "desmantelamiento" de esta herramienta, en contra de lo que han manifestado el regionalista José María Mazón y el socialista Miguel Ángel Palacio.

Fernández ha opinado que los partidos de la oposición son "los únicos" que se oponen a esta reforma y ha asegurado que éstos tratan de "engañar" para "justificar" lo "injustificable" de su rechazo.

Sobre las enmiendas presentadas, el consejero ha considerado que, mientras las del PP han permitido "mejorar" el proyecto de ley y hacerlo "más acertado y coherente" con la legislación vigente, las del PRC son "jurídicamente absurdas" e "inviables" y la del PSOE son "disparatadas" proponiendo un modelo de crecimiento propio del suelo urbano al rústico, una "barbaridad de tal calibre que se descalifica por sí sola".