Suenan tambores de guerra en el fondo sur del Santiago Bernabéu, pero por motivos que nada tienen que ver con el fútbol. Los Ultras-Sur, la hinchada más radical del Real Madrid, vive una guerra civil que algunos miembros temen, incluso, que acabe con la desaparición del grupo.

La última batalla de este conflicto tuvo lugar este sábado, poco antes del partido que enfrentaba al Real Madrid contra la Real Sociedad, y en el histórico local que los ultras tienen junto al Bernabéu, el Drakkar, donde se produjo una reyerta entre varios seguidores, con lanzamiento de botellas incluido, que provocó dos heridos leves y la intervención de la Policía Nacional.

El enfrentamiento provocó que la mitad del fondo sur del estadio luciera este sábado casi vacío.

Al parecer, el conflicto lleva gestándose desde hace dos años y obedece a temas púramente económicos (sobre todo por el control de los artículos de merchandising) según fuentes policiales, aunque también influyen las distintas simpatías politicas de los dos bandos, muy vinculados con la extrema derecha. Por un lado estarían los líderes ultras "históricos" y por otro los más jóvenes.

En el perfil de Facebook del grupo se podía leer el siguiente texto: "Esta gente lleva ya 2 años provocando una tensión en el seno del grupo debido a que se quieren hacer con él por motivos puramente económicos".