El Juzgado de Instrucción número 5 de Molina de Segura retomará este viernes la fase de instrucción del proceso judicial que investiga el asesinato de la pareja de holandeses Ingrid Visser y Ludewijk Severin en Murcia, con una vista en la que tendrá lugar la comparecencia de una decena de testigos y la aportación de diversas pruebas periciales.

En concreto, la sesión comenzará a las 9.30 horas, e incluirá la comparecencia de testigos como la dueña de la casa en la que presuntamente se cometieron los asesinatos, dos agentes de la Policía Nacional, el chofer del imputado Juan Cuenca, el individuo al que supuestamente Cuenca y Severin iban a vender una cantera de mármol, y cuatro empleados del hotel en el que se alojó la pareja antes de desaparecer, entre otros.

Además, la titular del Juzgado, Olga Reverte Villar, admitió la realización de varias pruebas periciales que serán aportadas previsiblemente este viernes.

Por ejemplo, solicitó que se averiguara el paradero de una serie de objetos encontrados en la entrada y registro del domicilio de Valentin Ion que constan en el sumario del caso. Y es que, pese a la dificultad de la lectura del acta de entrada y registro, en ella "se reflejan objetos que no se mencionan en el listado, salvo error u omisión", según el auto.

Asimismo, pidió que se aportara la carpeta blanca "que contiene once folios de reservas y vuelos y hoteles, así como una fotocopia de la documentación compulsada de Ludewijk Severin que se encontró en poder de Juan Cuenca" según una diligencia que, "salvo error u omisión, no está unida a la causa".

Por otro lado, Fidel Pérez, el abogado de Evedasto Lifante, solicitó que se practicara una pericial caligráfica del esquema con el entramado de negocio que presuntamente dio origen al crimen. La jueza ha pedido a la acusación particular, que ejerce la familia de los fallecidos, que aporten el original de dicho documento si está en su poder o que manifieste el lugar en el que se encuentra.

El Juzgado también ha considerado pertinente requerir al Instituto de Medicina Legal de la ciudad de Valencia para que remita el informe forense elaborado sobre las quemaduras que presentaba el acusado Juan Cuenca en el momento de su detención.

Asimismo, la jueza solicitó los movimientos de cuentas, libretas y tarjetas de crédito que los acusados Constantin Stan y Valentin Ion tienen en diferentes entidades de crédito, así como los titulares y autorizados en esas cuentas.

A petición de Marí Paz Giraldez, la abogada de María Rosa Vázquez, la jueza solicita además la comparecencia de uno de los agentes de Policía Nacional ante los que prestó declaración dicha acusada, con el fin de "acreditar su actitud y su voluntad de colaborar con la administración de justicia".

Además, la jueza solicitó que la embajada de España en Rumanía certifique la condición de militar de los dos ciudadanos de nacionalidad rumana, Ion Valentín y Constantin Stan, acusados del asesinato de la pareja de holandeses.

En concreto, la jueza pidió que se oficiara a través de la embajada la condición de militar de ambos acusados en su país de origen, a la vista de "la cartilla militar encontrada en poder de los imputados", según el auto al que ha tenido acceso Europa Press.

La jueza también solicitó a la embajada que indague sobre los antecedentes penales de ambos acusados, según las pruebas periciales ya acordadas y encontradas pertinentes, que serán expuestas en el proceso judicial que se retoma el próximo viernes, 8 de noviembre.

A petición del abogado de Serafín de Alba y Luis la jueza admitió también el registro de llamadas e incidencias en relación a la contratación de los servicios de Internet en la casa de este acusado.

En cambio, la magistrada rechazó el reconocimiento judicial de la finca de Alquerías en la que fueron enterrados los cadáveres y el correspondiente reportaje fotográfico solicitado por el letrado de Serafín de Alba y Luis con el fin de determinar con exactitud las características de accesibilidad al huerto.

El objetivo era determinar también la existencia del tocón y de la "perfecta ubicación de la excavación realizada el miércoles, 15 de mayo, cuando Serafín estaba en Alquerías junto a Juan Cuenca y dos individuos más".

La jueza declaró "impertinente" esta solicitud, al entender que en las diligencias obra una inspección ocular practicada por la Policía, y porque, para la prueba de inspección ocular, "se constituirá el tribunal con su integridad con el jurado en el lugar del suceso".

La titular del Juzgado también rechazó que se designara a un perito con la cualificación de ingeniero en comunicación para que emitiera un informe de análisis completo sobre el posicionamiento del teléfono móvil de Serafín de Alba y Luis.

En concreto, el abogado de Serafín de Alba y Luis pidió, al menos, los posicionamientos del teléfono de su cliente el día 13, reflejando "de forma gráfica el itinerario lógico" y las características de los repetidores que recogieron las señales de telefonía.

La jueza recuerda en el auto que esta prueba "no corresponde a cargo de la Administración de Justicia". Por tanto, si el letrado de Serafín de Alba y Luis desea someter a contradicción los informes policiales sobre los posicionamientos telefónicos y flujos de llamadas "deberá citar a juicio a los agentes que los confeccionaron y, en su caso, aportar un informe de parte relativo al mismo para desvirtuar el que ya obra unido a la causa".