El PP vasco ha advertido al Gobierno vasco que Osakidetza debe estar al servicio de los ciudadanos "y no de los intereses nacionalistas". La parlamentaria del PP Laura Garrido ha pedido la comparecencia del consejero de Salud, Jon Darpon, tras conocerse algunas medidas previstas en el II Plan de Normalización del Uso del Euskera en Osakidetza 2013-19, como la creación de un registro de pacientes y trabajadores euskaldunes o el reconocimiento con incentivos económicos del uso del euskera como lengua de trabajo.

"El PNV está priorizando sus obsesiones identitarias frente a los intereses generales de los ciudadanos en un asunto tan sensible como es la salud. Porque eso queremos que explique claramente cuáles son sus intenciones, porque las informaciones que conocemos nos generan mucha preocupación", ha denunciado Garrido en un comunicado.

En opinión de la parlamentaria popular, el Gobierno vasco debería priorizar la mejora de la atención sanitaria de los vascos sobre otros asuntos que "sólo responden a sus necesidades partidistas". "A la gente le preocupa que cuando va a Osakidetza sea bien atendida, reciba un servicio de calidad, disponga de los recursos adecuados y los profesionales tengan la experiencia y los conocimientos necesarios, más allá de que le atiendan en castellano o en euskera", ha insistido.

Para Garrido, la creación de un registro de pacientes y trabajadores para identificar las prioridades lingüísticas supone "marcar y etiquetar" a los ciudadanos por el uso de una lengua, "algo que se entromete claramente en el ámbito de la libertad individual".

"Cuando la pretensión además es ligar su uso en el trabajo a una serie de incentivos económicos resulta muy preocupante, porque entonces el euskera se convierte en un elemento claramente discriminatorio y que atenta contra el principio de igualdad", ha censurado.

En este sentido, ha criticado que dar incentivos por el conocimiento de una lengua es ir "contra el sentido común", porque "lo que debe primar es el conocimiento, la experiencia y la formación". "Querer condicionar la demanda en este ámbito evidencia una vez más el fracaso de las políticas de imposición lingüística llevadas a cabo por los gobiernos nacionalistas, en las que se han empleado tantos recursos económicos", ha subrayado.

Por último, Garrido ha reclamado al Gobierno vasco que se "centre" en las preocupaciones de los pacientes "y les pregunte por el servicio que presta y las mejoras que se pueden introducir para ofrecer un sistema de mayor calidad".

"En un escenario de contención del gasto, el Gobierno vasco debe preocuparse de todo aquello que redunde en la mejora y mantenimiento de la calidad del servicio, además de garantizar la sostenibilidad del sistema", ha concluido.