El alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya (PP), ha manifestado su apoyo a las víctimas del terrorismo y ha asegurado que "estará con ellas" en "cualquier concentración o manifestación" que convoquen en la ciudad.

Así lo ha señalado a preguntas de los periodistas sobre si acudiría a acciones impulsadas desde este colectivo como la concentración convocada este domingo por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) "para pedir justicia para las víctimas del terrorismo" tras el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contrario a la doctrina Parot.

Al respecto, Fernández de Moya ha destacado que sintió "indignación, rechazo y coraje" cuando conoció la decisión del TEHD "como persona y como jurista", al igual que cuando vio "salir (de la cárcel) a una sanguinaria, una etarra, una persona que ha asesinado a 24 españoles" en alusión a Inés del Río.

"Como alcalde de Jaén, las víctimas del terrorismo tienen todo mi apoyo. Y, si evidentemente convocan en la ciudad cualquier concentración o manifestación, el alcalde de Jaén estará con ellas, no le quepa la menor de las dudas", ha aseverado no sin recalcar que el recurso planteado por la Abogacía del Estado en defensa de la doctrina Parot que ha sido desestimado era "impecable".

En este sentido, el también presidente provincial del PP jiennense se ha referido a las "paradojas" que "tiene la vida", de manera que "muchas veces el derecho está muy alejado de la justicia en la calle y este es uno de esos casos". "El Tribunal Europeo de Derechos Humanos pone en la calle a una sanguinaria. ¿Y dónde quedan los derechos humanos de las personas asesinadas y sus familias? Porque les han quitado el derecho fundamental más importante que hay, junto a la libertad, la vida", ha afirmado.

Así las cosas y tras manifestar su plena coincidencia con los pronunciamientos del Supremo y el Constitucional sobre la doctrina Parot, ha reiterado que mientras sea alcalde y "después como persona anónima en la calle" estará "siempre del lado de las víctimas del terrorismo". "Cuando los terroristas sonríen y las víctimas lloran, es evidente que nos hemos equivocado", ha terminado.