Repsol ha invertido 1,5 millones de euros en sustituir los quemadores de cinco antorchas en Tarragona, una operación que requiere la utilización de grúas de gran tonelaje y que se enmarca en la parada en el complejo industrial que la compañía inició el pasado 1 de octubre.

Según ha informado este lunes en un comunicado, las antorchas son elementos de seguridad que están en constante funcionamiento, por lo que su quemador, también conocido como TIP, sufre un desgaste que hace que esta pieza se deba cambiar cada cinco años.

Los trabajos de cambio de TIP se realizan a una altura de unos 100 metros, con lo que, debido a la complejidad de esta operación, el Grupo de Rescate Industrial (GRI) participa de forma preventiva mientras dura la maniobra.

La parada de Repsol representa un coste total de 95 millones de euros, y ya se ha completado la fase de producción, que consiste en vaciar y preparar las instalaciones para que el personal de mantenimiento y revisión pueda comenzar con la segunda fase, la de ejecución de los trabajos programados.

Las empresas y trabajadores contratados por Repsol para la parada se han ido incorporando progresivamente, y actualmente el número de personas que accede al complejo industrial está en el máximo previsto, que se sitúa en los 1.500 trabajadores contratados específicamente para la parada, además de los 1.600 habituales de Repsol.