La Consejería de Hacienda y Administración Pública de la Junta de Andalucía ha criticado el "nuevo hachazo a las comunidades autónomas" que supone el Plan Presupuestario 2014, remitido por el Ministerio de Economía a Bruselas, y ha alertado de la reducción de los gastos de los ayuntamientos por lo que denominan 'competencias impropias', que supone "un recorte nuevo e inducido que perjudica a las comunidades autónomas, dado que en la práctica supone que las corporaciones locales dejarán de prestar servicios esenciales pero sin que esto se compense de ninguna manera a los gobiernos regionales que asumirán estas competencias".

En una nota remitida a Europa Press, la Consejería ha advertido de la "importante incidencia" de dicho Plan en las administraciones públicas en general, y en las comunidades autónomas en particular.

De esta forma, aunque, según indica la Junta, en el documento remitido a Bruselas, "el Gobierno destaca el 'importante esfuerzo' que las comunidades autónomas tienen previsto realizar en 2013 'en sus propios presupuestos en todos los ámbitos', pese a este reconocimiento, el documento vuelve a hacer ver cómo se castiga a las comunidades autónomas, a las que se les obliga a realizar una vez más fuertes ajustes en los ejercicios 2014 y 2015".

De esta forma, apunta que este "hachazo" se suma "al esfuerzo que han venido realizando hasta el momento las regiones, que han tenido que hacer frente a un plan económico financiero, al compromiso de la reducción del gasto público y a un objetivo de déficit que ha sido injusto en todos los años y que continúa siéndolo en el propio ejercicio, cuando tendrán que ajustarse a un uno por ciento del PIB frente al 3,71 por ciento del Gobierno central".

Así, la Junta precisa que, en concreto, "las comunidades autónomas deberán realizar un ajuste en sus gastos de 1.927 millones de euros en 2014 y otros 2.192 millones en 2015, lo que supone más de 4.000 millones menos con los que cuentan las regiones para su día a día".

La Junta ha recordado que "son los gobiernos regionales y los impuestos regionales los que soportan los servicios básicos, como la sanidad, los servicios sociales o la educación, de manera que incidir de nuevo los recortes en este ámbito supone seguir llevando el sostenimiento de estos servicios al límite".

Precisa que "en el propio documento se recoge cómo estas políticas están perdiendo peso en el gasto público respecto al PIB con la previsión de que, por ejemplo, la sanidad baje en 2014 a un 5,8 por ciento del PIB y la educación a un 4,3 por ciento".

Para la Consejería, este plan presupuestario presentado a Bruselas "abunda en la desigualdad entre territorios y castiga, una vez más, a quienes han hecho un mayor ejercicio de eficiencia en el gasto público y, por tanto, disponen ya de menor margen de actuación".

Merma en los ayuntamientos

Considera "especialmente preocupante es el dato de la reducción de los gastos de los ayuntamientos por lo que denominan 'competencias impropias' y que el propio Gobierno de España estipula en 3.735 millones de euros para el período 2013-2019", lo que supone "un recorte nuevo e inducido que perjudica a las comunidades autónomas, dado que en la práctica supone que las corporaciones locales dejarán de prestar servicios esenciales a la ciudadanía, pero sin que esto se compense de ninguna manera a los gobiernos regionales que asumirán estas competencias".

De esta forma, advierte de que "a partir de ahora, serán las comunidades autónomas las que deberán asumir la prestación de estos servicios que venían realizando los ayuntamientos, pero sin disponer de recursos adicionales para ello", algo que supone "una nueva vuelta de tuerca a la situación de agravio que deberán soportar estas administraciones en los próximos años".

Por otro lado, la Junta precisa que el documento recoge también que va a producirse un incremento en los ingresos de las comunidades autónomas "que no parece real una vez que se examina los presupuestos de las distintas autonomías y donde no aparece tal crecimiento en los ingresos".