Hiendelaencina (Guadalajara) lleva siete días sin agua al haberse echado "por error" gasóil en un depósito equivocado

El municipio de Hiendelaencina (Guadalajara) lleva una semana sin poder hacer uso doméstico del agua de la localidad ya que, al parecer, por error, se echó gasóil en el depósito de agua de una casa rural, y no se sabe cómo ha pasado a la red general.

El municipio de Hiendelaencina (Guadalajara) lleva una semana sin poder hacer uso doméstico del agua de la localidad ya que, al parecer, por error, se echó gasóil en el depósito de agua de una casa rural, y no se sabe cómo ha pasado a la red general.

El alcalde de Hiendelaencina, Mariano Escribano, ha señalado a Europa Press que el pasado sábado empezó a recibir llamadas de vecinos diciendo que "el agua salía roja y que era gasóil", y aunque su primera impresión fue que eso no podía ser, poco después, "una chiquita que se estaba duchando en una casa rural salió por ahí y dijo que se estaba duchando con grasa", ha dicho.

A raíz de esto, y tras observar que efectivamente el agua tenía gasóil, se acercaron a la casa rural y hablaron con la dueña y con su suministrador y, según Escribano, "se comprobó que había sido un accidente y que en vez de echar el gasóil en el depósito del hidrocarburo, se equivocó y lo echó en el del agua potable" de esta vivienda.

Ahora la preocupación del alcalde está en saber cómo este hidrocarburo pasó del depósito de la casa rural a la red general que suministra el agua a todo el pueblo.

A nivel personal tiene sus sospechas pero tan sólo son eso, cree que puede tratarse de un error de instalación o pudiera ser también de un fallo en alguna válvula, pero "esto se está complicando", dice.

De momento, ha comunicado lo sucedido a Sanidad, desde donde han tomado muestras sin que aún se conozcan los resultados, pero si les han pedido que no consuman esta agua. Para ello, desde Diputación han llevado una cisterna con este líquido al pueblo con el fin de que sus vecinos tengan al menos para el uso doméstico.

Para Escribano lo que ha pasado es "de matrícula de honor". Ahora hay que ver cómo han podido pasar 300 litros de gasóil a la red genera de abastecimiento del pueblo, pero espera que cuanto antes les den una respuesta porque "los vecinos están muy preocupados".

"Nadie nos ha dicho que cortemos el agua pero si que no la consumamos", insiste Escribano, preocupado por lo sucedido y también por la falta de asesoramiento y apoyo que está recibiendo de las administraciones. "Se dice que hay que apoyar a los pueblos y aquí estoy solo", puntualiza.

Este sábado está prevista una reunión con los vecinos para tratar de tranquilizarles y darles a conocer lo que él sabe, pero no "aún no sabemos cómo podremos atajar este problema", ha concluido.

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