La X edición del SEFF pone su mirada en la obra de Léos Carax, Gunvor Nelson y Claude Lanzmann

La X edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla (SEFF), que se celebra del 8 al 16 de noviembre, prestará una especial atención a la obra de Léos Carax, Gunvor Nelson y Claude Lanzmann, tres cineastas de personalidad única y obra icónica en el panorama cinematográfico internacional. El público sevillano podrá incluso compartir sus impresiones con estos creadores a través de una serie de encuentros y charlas programadas dentro de la actividad del evento.

La X edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla (SEFF), que se celebra del 8 al 16 de noviembre, prestará una especial atención a la obra de Léos Carax, Gunvor Nelson y Claude Lanzmann, tres cineastas de personalidad única y obra icónica en el panorama cinematográfico internacional. El público sevillano podrá incluso compartir sus impresiones con estos creadores a través de una serie de encuentros y charlas programadas dentro de la actividad del evento.

El cineasta francés Léos Carax (Suresnes, 1960) es el primero de los invitados internacionales que aterrizará este año en el SEFF. 'Enfant terrible' del cine europeo, Carax ha trasladado su espíritu torturado y su estilo lírico y onírico a la mayoría de sus películas, que cuentan con legiones de seguidores en todo el continente.

Léos Carax —anagrama de su verdadero nombre, Álex Óscar DuPont—, que comenzó su relación con el cine como crítico de la prestigiosa publicación 'Cahiers du Cìnema', mantendrá un encuentro con el público sevillano el sábado 9 de noviembre, con quien charlará a propósito de su título más reciente, 'Holy Motors' (2012). Esta película supuso el regreso de Carax al cine después de 13 años de silencio. Para ello eligió una historia que desafiaba claramente la lógica de la narrativa del cine convencional, de estética abiertamente feísta que, sin embargo, obtuvo un éxito arrollador en taquilla.

Junto a 'Holy Motors', que se proyectó en el SEFF'12 dentro de la sección Special Screenings, el Festival de Cine de Sevilla ha programado, para toda la semana de la muestra, títulos tan emblemáticos como 'Chico conoce a chica' (1984), 'Mala sangre' (1986), 'Los amantes del Pont Neuf' (1991) y 'Pola X' (1999), una película con la que, también después de casi una década escondido, comenzó a fraguar su imagen de genio incomprendido.

Asimismo, el Festival de Cine Europeo pondrá su mirada en la obra del célebre director y guionista francés Claude Lanzmann (Bois-Colombes, 1925), de quien se proyectará su última película, el documental 'El último de los injustos' (2013). Galardonado con el Oso de Honor en el Festival de Cine de Berlín, Lanzmann es el responsable de 'Shoah' (1985), un documental épico, considerado su obra cumbre, que recrea el Holocausto a través de testimonios impactantes.

En colaboración con el Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus), Claude Lanzmann mantendrá un encuentro con jóvenes universitarios tras el visionado de 'El último de los injustos'.

Finalmente, la prestigiosa directora sueca Gunvor Nelson (Estocolmo, 1931) también visitará el certamen de cine europeo el próximo mes de noviembre. Nelson, cuyos filmes se han exhibido en los principales museos de arte del mundo, como el MoMA de Nueva York, Moderna Museet de Estocolmo y filmotecas de toda Europa y América del Norte, también visitará Sevilla y será objeto de un ciclo, tras el cual los espectadores podrán mantener un encuentro con la cineasta.

El SEFF permitirá al público sevillano disfrutar de tres sesiones en las que se proyectarán las obras más importantes de Nelson. En la primera sesión se podrá ver los cortometrajes 'Schmeerguntz' (1965), 'My name is Oona' (1969), 'Take off' (1972) y 'Frame line' (1983). En la segunda, se proyectarán 'Red shift' (1984), 'Time being' (1991) y 'True to life' (2001), mientras que en la tercera y última se verán los cortos 'Moons pool' (1973), 'Light years expanding' (1988), 'Natural features' (1990) y 'Tree-line' (1998).

Gunvor Nelson ha pasado media parte de su vida en Estados Unidos, donde realizó su primera película en 1965. Por aquel entonces, muy pocas mujeres eran reconocidas como cineastas independientes, aunque Brakhage, Anger, Warhol y otros autores masculinos estuvieran ya siendo aclamados por su trabajo. Sus imágenes, ambiguas y poéticas, hablan de los sueños, de la niñez, de la memoria, del envejecimiento y la muerte, así como de las dificultades de comunicación entre generaciones y del uso sexista del cuerpo femenino, lo que se ha convertido en una de sus principales señas de identidad estética.

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