Un niño de 9 años puede ser juzgado por conducir a 140 Km/h y tomar dos aviones sin billete ni reserva en EEUU

  • Primero lo detuvieron por ir a gran velocidad en un vehículo robado.
  • Se escapó y tomó dos vuelos sucesivos para llegar a Texas.
  • No tenía ni autorización, ni billetes ni reserva.
  • Ha puesto en entredicho la seguridad en los aeropuertos estadounidenses.
  • La fiscalía de EEUU no sabe cómo afrontar el caso.

Un niño estadounidense de nueve años puede enfrentarse a varios cargos judiciales después de conducir un automóvil a gran velocidad y viajar, sin billete ni reserva, en dos aviones a través de varios estados antes de aterrizar en Texas.

Con su aventura el pequeño Samaj Booker, que permanece en un centro juvenil en San Antonio, en Texas, ha burlado las teóricamente estrictas medidas de seguridad aeroportuarias, poniendo en duda su eficacia. Y todo por llegar a Dallas, donde está "su casa".

Todo comenzó el domingo, cuando la policía en Lakewood, en las afueras de Seattle (Washington) descubrió que quien conducía a más de 140 kilómetros por hora el vehículo robado que preseguían era un niño de nueve años.

El pequeño Booker fue devuelto a su madre, pero a la mañana siguiente se escapó de nuevo.

¿No puedo ir en coche? Pues en avión...

Booker se dirigió al aeropuerto de Seattle Tacoma, donde persuadió a empleados de la Southwest Airlines de que le permitieran abordar un vuelo a Phoenix, en Arizona.Booker se presentó, según un comunicado de Southwest Airlines, en el mostrador como un niño de 12 años y pidió su tarjeta de embarque diciendo que su madre ya se encontraba en el avión.

El truco funcionó y el niño recibió una tarjeta de embarque. El vuelo originario de Seattle aterrizó en Phoenix, donde Booker fue autorizado a cambiar de avión para aterrizar en San Antonio.

Después, cuando trataba de abordar otro avión para ir a Dallas sin reserva, los empelados de la aerolínea llamaron a la policía.

Quería llegar a "su casa" en Dallas

Guttu aseguró que el niño de nueve años quería salir del estado de Washington y regresar a Dallas, donde viven miembros de su familia, entre ellos su abuelo materno. El pequeño llevaba viviendo en Lakewood desde hacía unos meses. Su madre declaró a la policía que el niño no era feliz en Washington y "sólo consideraba a Dallas como su hogar"

Aunque los fiscales norteamericanos están recogiendo antecedentes para determinar cómo proceder en el caso, Booker podría recibir una citación judicial para responder por cargos federales como escapar de la policía, robar un vehículo y conducir sin licencia.

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