El subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar, ha presidido este martes la festividad de la Merced, patrona de Instituciones Penitenciarias, y ha reconocido "el trabajo, la constancia y el valor" de todas las personas que decidieron dedicar una gran parte de su vida a ayudar a aquellos que "no fueron capaces de llevar una vida en libertad con el resto de la sociedad".

Ha resaltado "la encomiable labor" de los funcionarios que trabajan en los centros penitenciarios, aunque ha reconocido la "situación difícil y compleja" por la que se está atravesando, el "trabajo sacrificado" y "la palpable falta de recursos para todos los sectores", especialmente, "para el sistema penitenciario y para todo el sector público".

En este punto, ha señalado que "todos estamos obligados a ser solidarios" con unas medidas que, afectando a sectores esenciales de la sociedad como la sanidad, la educación y la justicia, "vienen obligadas por una situación financiera dura y complicada, que este Gobierno, evidentemente, no desea".

Al respecto, el representante del Ejecutivo central en la provincia ha puesto entre otros ejemplos el hecho de que no se haya podido poner en marcha el nuevo Centro Penitenciario de Archidona o "que es difícil realizar algunas tareas internas que serían muy necesarias"; además de "atender de una forma más acorde las legítimas aspiraciones retributivas de los funcionarios".

No obstante, ha indicado que, dentro de sus posibilidades, la Dirección General de Instituciones Penitenciarias está trabajando en la preparación de nuevos programas de atención a los internos orientados tanto a la prevención como a la curación y a su rehabilitación.

Por otro lado, Hernández Mollar ha incidido en que la política del Gobierno está diseñada para contribuir a la tarea de mejorar la convivencia entre las personas y salvaguardar el estado de bienestar de todos los ciudadanos.

Asimismo, ha afirmado que un centro penitenciario "nunca debe ser contemplado como un lugar de castigo y desarraigo", sino todo lo contrario "como una vía hacia la posibilidad de cambiar y de reconducir el comportamiento que ha llevado a la privación de la libertad".

El subdelegado ha puesto de manifiesto la "necesidad de realizar convenios con instituciones y fundaciones públicas y privadas para lograr una integración laboral real".