Rajoy asegura que "en absoluto" el Gobierno se plantea regular el papel del príncipe

  • La nueva operación del rey reabre el debate sobre regular el papel de la Corona.
  • PSOE y UPyD proponen regular mejor la transparencia en la casa real, la abdicación y la figura del príncipe.
  • IU cree que es el momento para que la ciudadanía elija que modelo de Estado quiere, pero se ve sin apoyos en el Parlamento.
El rey Juan Carlos y doña Sofía.
El rey Juan Carlos y doña Sofía.
GTRES
El rey Juan Carlos y doña Sofía.

El mismo día en que el rey se somete a una nueva operación de cadera, la octava intervención en tres años, el debate de que si el monarca, envejecido y renqueante, debe abdicar para dar paso al príncipe Felipe, parece ser que se sitúa en centro político.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que "en absoluto" el Ejecutivo se plantea abordar ahora una regulación del papel del Príncipe de Asturias, y que no tiene ninguna intención de hacerlo porque "no hay ninguna razón". Rajoy ha negado la posibilidad de hacer en este momento esa regulación en declaraciones a los periodistas a su llegada a Nueva York para participar en la 68 Asamblea General de la ONU.

Algunos partidos han alzado la voz para intentar regular el papel de la Corona, e incluso IU abandera en solitario el debate de si son necesarios cambios legislativos para ir más allá y que sean los ciudadanos los que elijan entre monarquía y república, en definitiva, qué Jefe de Estado quieren.

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha rechazado este martes que el Gobierno tenga encima de la mesa algún proyecto de reforma complementaria de la monarquía para regular las funciones del príncipe. "Ni hay nada encima de la mesa ni el Ejecutivo tiene ningún proyecto para que así sea. La regulación es suficiente, lo cual no quiere decir que no pueda hacerse alguna complementaria. Pero no debe responder a momentos coyunturales como el actual. Debe hacerse con un criterio de permanencia", aseguró Gallardón.

El relevo, sin regular

Entre intervenciones quirúrgicas, cacerías secretas de elefantes, yernos complicados y nietos díscolos, la Corona española no ha vivido sus mejores días en los últimos tres años. La imagen de la familia real ha empeorado, así lo reflejan los últimos barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas, y se ha hablado de muchas posibles soluciones a este problema: desde las disculpas públicas y una mayor transparencia de la casa real hasta una cesión de competencias al príncipe de Asturias o incluso la abdicación.

Han sido meses de debate público y político sobre la situación del rey y su posible relevo, pero parece que hasta ahora nadie se había dado cuenta de un detalle importante para la discusión: ni la abdicación ni las funciones del príncipe están reguladas por la Constitución. Esta semana, con el monarca de nuevo en el quirófano por una operación de cadera y con una recuperación que podría durar hasta seis meses, el asunto ha llegado al Congreso.

Aunque el rey esté de baja, el Príncipe no puede ejercer de Jefe de Estado. Algunos reclaman un estatuto jurídico para él similar al del rey, que regule aspectos como una eventual abdicación, una renuncia de la infanta o una asunción temporal de funciones. El artículo 57.5 de la Constitución no está desarrollado, a pesar de que han pasado 35 años desde la aprobación del texto.

La Carta Magna sí contempla una abdicación del rey, pero dice que se resolverá "por una Ley orgánica". Lo mismo ocurriría con una renuncia "y cualquier duda de hecho o de derecho que ocurra en el orden de sucesión". UPyD ha anunciado precisamente este martes que va a registrar en los próximos días una iniciativa legislativa (una proposición no de ley) para desarrollar el Título II de la Constitución, el relativo a la Corona. El objetivo es regular las tareas del Príncipe sin cambios constitucionales.

Ponencia del PSOE

Ramón Jáuregui, diputado del PSOE y responsable de la Conferencia Política que el partido celebrará en noviembre, ha explicado a 20minutos que lo que plantea su partido es "una modernización de la monarquía, aunque lo que hay de forma implícita en la ponencia es una reafirmación del modelo de Estado". El PSOE propone desarrollar también el artículo 57.5 de la Constitución y regular la transparencia en la casa real, la abdicación y la figura del príncipe. El plazo para presentar enmiendas a la ponencia finaliza el 26 de octubre, pero advierte que "España no está para cuestionar la monarquía en estos momentos".

El debate sobre la forma de Estado, que sí estuvo sobre la mesa en los meses previos a la aprobación de la Constitución de 1978, ha vuelto con fuerza, tal como reconoce el propio Jáuregui. "Actualmente, en muchas asambleas y debates, gente dentro del partido recuerda la postura histórica del PSOE, pero oficialmente la posición es la de ratificar el modelo y no cuestionar la monarquía", señala.

Izquierda Unida, por tanto, se queda de momento sola en llevar más allá el debate. Su líder, Cayo Lara, ha explicado en la Cadena Ser que no considera primordial regular las funciones del príncipe, sino preguntar a la ciudadanía que modelo de Estado quiere. "No creo que haya que entrar en una regulación sin saber antes si el pueblo quiero un nuevo rey". Lara cree que esta es una "oportunidad de oro para promover una consulta al pueblo español". Fuentes de IU han explicado a este diario que hace falta un referéndum que dé la oportunidad de elegir entre monarquía y república. Pero para ello hay que cambiar la Constitución, "ya que un referéndum no es hoy en día vinculante". No obstante, se ven sin apoyos en el Parlamento para dar este paso.

Respecto del futuro de la institución, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) cree que la cuestión fundamental que hay que plantearse es si el papel de la Corona aporta equilibrio o una integración "satisfactoria" de las diferentes "naciones" existentes en el Estado. "Vista la trayectoria, por el momento la respuesta es negativa", aseguran. Los nacionalistas vascos creen que la Casa Real es la institución más opaca del Estado, "al menos lo ha sido hasta ahora, y tiene que adaptarse a los nuevos tiempos si quiere sobrevivir. Debe reinventarse y le exigimos luz y taquígrafos, de la misma manera que se le exige a otras instituciones".

Los partidos catalanes

Los partidos catalanes no ven este debate como suyo. Alfred Bosch, de ERC, no ha querido opinar sobre la posibilidad de introducir cambios constitucionales para regular las funciones del príncipe. "Es un asunto de los españoles en el que no quiero hacer injerencias. La monarquía me parece una institución poco adecuada a las necesidades democráticas de la Europa del Siglo XXI. Somos republicanos, pero son los españoles los que tienen que decidir; estamos por construir una república catalana".

En CiU, el portavoz en el Congreso, Josep Sanchez Llibre, ha señalado que "actualmente ya hay mecanismos jurídicos y constitucionales para ampliar las funciones del príncipe sin cambiar la Carta Magna". La prioridad de CiU es la consulta soberanista, añade.

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