El director y el empleado de una oficina de la antigua Caja Cantabria, ahora Liberbank, de Astillero imputados por un supuesto delito de estafa por la venta de participaciones preferentes a una ama de casa de 75 años de Liaño (Astillero) han asegurado ante el juez que en las preferentes que han comercializado explicaron las características y los riesgos de este producto financiero y que éste no estaba cerrado a un perfil concreto de cliente.

Así ha quedado recogido en el escrito de la declaración de ambos ante el Juzgado de Instrucción Número 1 de Santander, al que ha tenido acceso Europa Press, y en la que se señala que el empleado que comercializó las preferentes al ama de casa ha reconocido que "no se leyó" el folleto informativo de este producto, si bien tenía "conocimiento" sobre el mismo por "las circulares recibidas así como por las charlas formativas que se realizaban en cada emisión".

Además, este empleado ha afirmado que "cree" que tras explicarle a esta mujer, de la desconocía su nivel de estudios o condición laboral, ésta las "entendió perfectamente" y, dado que era cliente con su hija, se ofreció a facilitarle "cualquier información que posteriormente necesitaban".

Ha añadido que, además de informarle verbalmente, se le comunicó la existencia de que había un tríptico informativo sobre el producto, si bien ha asegurado que "no recordaba" si la mujer lo solicitó.

Ha apuntado que la mujer "siempre decía" que lo iba a comentar con su hija por lo que consideró que tenía un asesoramiento aparte de sus propios conocimientos.

También ha asegurado no recordar "por qué se hizo constar que la denunciante se negó a facilitar la información para hacer el test de conveniencia".