El subdelegado del Gobierno en Jaén, Juan Lillo, ha afirmado que la partida de 1,8 millones de euros comprometida por el Ejecutivo central para financiar alojamientos protegidos para universitarios con escaso nivel de renta "caducó" por "incumplimiento de plazos", ya que ni el cartel anunciador de la intervención se instaló en 2011 ni en ese año comenzaron las obras.

En rueda de prensa, Lillo ha salido al paso este martes de las declaraciones realizadas por el rector de la Universidad de Jaén (UJA), Manuel Parras, sobre este proyecto impulsado para construir 145 alojamientos protegidos para universitarios de Jaén, cuya inversión total es de 14 millones de euros.

"Sin ánimo de polemizar", ha querido dejar claro "el fondo del asunto", sobre cuya situación preguntó al Ministerio de Fomento a través de la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo, rechazando así que no posea un conocimiento certero de él, como señaló el rector. Igualmente, ha calificado de "apreciación muy libre" afirmar que de sus manifestaciones se puede entender que la UJA no ha hecho los deberes.

Tras recordar que el convenio marco se firmó el 23 de diciembre de 2010, el subdelegado ha apuntado que el compromiso de la Universidad era instalar un cartel informativo sobre las obras e iniciarlas antes del 31 de diciembre de 2011. "Ni las obras se iniciaron en dicho ejercicio tal y como asumieron con la firma del acuerdo, ni el cartel se instaló", ha manifestado Lillo, para el que el propio rector reconoce que "incumplió" esas condiciones al precisar que el cartel anunciador se colocó el 7 de mayo de 2012.

Así las cosas, ha insistido en que el programa de alojamientos protegidos del Plan Estatal 2009-2012 "está cerrado", de modo que "el compromiso ha decaído por incumplir en los plazos". En cualquier caso, ha asegurado no tener inconveniente alguno en mantener la reunión que "acordó hace meses" con Parras para analizar el proyecto para intentar recuperar la inversión o bien lograr alguna partida presupuestaria para el próximo ejercicio, dejando claro que "en este año que no es posible".

Junto a ello, Lillo ha declarado que, por ahora, la única alternativa a la que puede acogerse la UJA es a través de la Junta de Andalucía, ya que ésta "tiene capacidad para facilitar el acceso al alojamiento de los jóvenes mediante el nuevo programa de alquiler por nivel de renta para toda la población con menores recursos económicos, incluidos los jóvenes", punto en el que ha indicado que el Gobierno autonómico será la institución que más fondos reciba con el 17,1 por ciento de las ayudas trasferidas por el Estado a las comunidades.

"A ver si resulta que una obra de 14 millones no se puede iniciar porque falta 1,8", ha añadido Lillo, quien ha reiterado que "los compromisos no caducan" y "la voluntad es que se haga", pero "lo que sí caduca es el documento" y la subvención porque no la actuación no comenzó "en tiempo y forma".

MAGISTERIO

Por otro lado, se ha referido a la visita que, junto al alcalde, José Enrique Fernández de Moya, realizó el pasado jueves a las obras de rehabilitación de la antigua Escuela de Magisterio y en la que no participó Parras, para quien "parece lo correcto" que el rector hubiera estado presente.

Lillo, tras reconocer que el edificio pertenece a la UJA, que también es responsable de la intervención, ha comentado que de los 3,8 millones que supone, "tres millones los pone el Estado" y desde la Subdelegación "hay interés y también obligación" de conocerla. Al hilo, ha dicho que se contactó con la Universidad para comunicar la intención de "ver las obras y en ningún momento se nos dijo que no podíamos ir".

"Propusimos una fecha y nos dijeron que parecía un poco precipitado, pero que no había ningún problema y que si el rector no podía ir porque tenía compromisos adquiridos con anterioridad, acudiría el vicerrector", ha afirmado para agregar que "no acudió" ninguno. Sin embargo, "no pasa nada" y "de la boca del subdelegado ni alcalde salieron ninguna palabras de reproche porque no hubiera nadie de la Universidad".