Al menos 30 personas murieron este martes y 110 resultaron heridas en una serie de explosiones con coches bomba registradas en varias zonas de Bagdad, según una fuente del Ministerio iraquí del Interior.

El número total de víctimas en todo el país en esta jornada asciende a 33 muertos, ya que trece personas fallecieron en otros actos de violencia, añadió la misma fuente.

Dos coches bomba estallaron en un mercado popular en Ciudad Sadr, en el este de Bagdad, lo que causó seis muertos y quince heridos, en el atentado más sangriento registrado en la capital.

Cuatro civiles perecieron y dieciséis resultaron heridos en una explosión en la plaza de Al Naser, en el centro de la ciudad, mientras que tres personas más fallecieron y doce sufrieron heridas por el estallido de otros dos vehículos en la zona de Al Batauin.

Otras siete personas perdieron la vida y cerca de cuarenta resultaron heridas en otras explosiones similares en el norte, este y suroeste de Bagdad.

En cuanto al resto de ataques, el más grave se registró en la ciudad de Al Faluya, 50 kilómetros al oeste de Bagdad, donde perecieron tres policías y cuatro hombres armados en enfrentamientos.

Además, doce agentes resultaron heridos en este ataque, lanzado por un grupo armado contra la comisaría de Al Tahadi.

En el centro de esta misma ciudad, un policía pereció y un civil sufrió heridas de gravedad al ser tiroteados por hombres armados.

Otros dos policías fallecieron y dos resultaron heridos por el impacto de un proyectil de mortero contra una comisaría en la zona de Al Mushahada, 35 kilómetros al norte de Bagdad.

Tres personas perdieron la vida en otros actos violentos registrados en la zona de Al Taremia, al norte de la capital; en Al Shaab, al noreste de Bagdad, y en la provincia de Diyala.