La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha mostrado este martes su "respeto absoluto" por las decisiones judiciales" y "su apoyo" a las víctimas y sus familiares, tras conocer la decisión del juzgado número 21 de Valencia que ha rechazado la petición de la Fiscalía de reabrir diligencias por el accidente del metro ocurrido en 2006.

Bonig ha recordado que desde el Consell "se ha mantenido apoyo total a las víctimas y a sus familiares" y se ha colaborado con la justicia "en todo lo que se ha requerido". La consellera ha indicado en un comunicado que desde Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) y la Generalitat "se facilitó toda la documentación, los técnicos se pusieron a disposición de la justicia y las instituciones, y la justicia ha decidido en tres ocasiones archivar el caso".

La titular de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente ha apuntado que según ha dicho el propio juzgado, "no hay motivos para reabrir la investigación ya que no hay ninguna causa nueva". Bonig ha recordado que "todas las causas se investigaron y se pusieron encima de la mesa". Por lo tanto, ha reiterado su "respeto absoluto a las decisiones judiciales", ha concluido.

Rechazo del juzgado

El juzgado de Instrucción número 21 de Valencia ha rechazado la petición de la Fiscalía de reabrir las diligencias por el accidente de metro ocurrido en Valencia en 2006 —en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas— al estimar que no se han aportado argumentos novedosos y al entender que "no cabe la menor duda" de que el siniestro se produjo como consecuencia de una "velocidad inadecuada" del maquinista.

Así consta en un auto de la magistrada Nieves Molina, facilitado por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), y contra el que cabe recurso de reforma ante el juzgado en el plazo de tres días o, en su caso, recurso de apelación directamente ante la Audiencia Provincial en cinco días.