Salamanca integra riqueza histórica, cultural (no en vano es Patrimonio de la Humanidad declarado por la Unesco) y gastronómica. Es una de las ciudades universitarias de España por antonomasia. En torno a sus facultades creció un espléndido patrimonio arquitectónico que hoy es motivo de visita de miles de turistas. Hay mucho que ver en Salamanca; estas son solo algunas pistas.
Para amigos de las leyendas
La Cueva de Salamanca no es más que los restos de la cripta de lo que fue la Iglesia de San Cebrián. Dice la leyenda que aquí daba clases el mismísimo diablo. Disfrazado de sacristán, el demonio eligió a un grupo de siete estudiantes para enseñarles ciencias ocultas, adivinación, astrología y magia. Pasados 7 años debía elegir a uno de los estudiantes para que quedara a su servicio.
Para literatos
En la Plaza Mayor se encuentra el Café Novelty, fundado hace más de cien años, donde se reunía la bohemia salmantina. Hoy el establecimiento intenta seguir conservando ese espíritu: sigue habiendo tertulia, alguna charla y hasta una revista propia, llamada Papeles del Novelty.
Para familias
Salamanca ha creado su gran espacio verde a lo largo de la ribera del río Tormes. Es el Parque de la Aldehuela, un lugar perfecto para disfrutar con la familia al aire libre. Hay para todos; hasta un jardín botánico y un circuito de coches teledirigidos para los más pequeños de la familia.
Para ir de compras
La calle del Toro es un paseo peatonal que nace en una esquina de la Plaza Mayor. Es el lugar más indicado para curiosear entre sus tiendas y hacer algunas compras. De paso podemos entrar en un Zara distinto. El local que ocupa esta tienda de ropa fue antes un convento; de hecho, conserva alguna de sus paredes y fachadas históricas.
Para aventureros
Outdoor Activo presume de ser la única empresa salmantina dedicada al ocio en plena naturaleza. Ofrecen todo tipo de actividades que saciarán las ganas de adrenalina, tales como rafting, puenting, paintball e incluso rutas a bordo de quads.
Para gastrónomos
A menos de 50 kilómetros de Salamanca se encuentra el pueblo de Guijuelo, conocidísimo por su jamón ibérico de denominación de origen propia a la que los paladares más exquisitos no se podrán resistir. Bien valdrá la pena el viaje hasta allí.
Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!
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